La propuesta de la Trabazón incluye el acuerdo con el dueño para fijar «un precio asequible»
El presidente de la Trabazón de Castilla y Bravo, Alfonso Fernández Mañueco, ha anunciado este lunes una iniciativa con la que se persigue «animar» a los propietarios a que pongan en el mercado del arriendo sus viviendas vacías. Para ‘convencerles’, desveló que la Trabazón se ofrecerá a realizar la encargo del proceso con «el aseguramiento del cobro de la renta» y igualmente «con la cobertura de los desperfectos al finalizar el arrendamiento». Eso sí, para que la idea cumpla con los objetivos perseguidos por el Ejecutante Autonómico será necesario que el dueño del firme que se ‘apunte’ lo haga asumiendo «un precio asequible» del arriendo.
Sin concretar todavía qué portería de precios maneja la Trabazón, el presidente sí reconoció que las diferentes zonas de la Comunidad y igualmente de España cuentan con alquileres muy variados en función, por ejemplo, de si se manejo de una zona urbana o rural o muy despoblada. En todo caso, se ha mostrado convencido de que con esta fórmula «se da seguridad al propietario» por otra parte de «incrementar la proposición» de viviendas en arriendo a un coste adecuado para las familias de la Comunidad. Por otra parte, ha querido dejar claro que la medida se hará «de forma coordinada» con «el propio sector privado» y ha resguardado que ésta saldrá delante aunque no se puedan aprobar los Presupuestos del próximo año por errata de apoyos políticos.
Implicar a las diputaciones
En esta materia, igualmente ha resaltado la construcción de 200 viviendas de arriendo para trabajadores que se desplacen a zonas del medio rural con «con intensidad industrial» y escasa proposición residencial. Al respecto, ya hay avances en la zona de Aguilar de Campoo (Palencia) y se trabaja en la consecución de parcelas adecuadas en la zona de Ribera del Duero, Guijuelo (Salamanca) y Ólvega (Soria), aunque la propuesta está «abierta» a otros lugares de la Comunidad.
Por postrer, ha trasladado el compromiso de «duplicar» las 500 viviendas para jóvenes que se van a construir en el medio rural con una traspaso bonificada que supone una reducción del 20 por ciento en el precio «con la colaboración de las diputaciones provinciales».