El sumario por la Operación Kitchen tendrá un equipo de testigos de excepción. La Sección Cuarta de la Audiencia Franquista, que será quien enjuicie el supuesto espionaje al extesorero del PP Luis Bárcenas por cuenta del Tarea del Interior que comandaba Jorge Fernández Díaz, ha admitido la inventario de testigos que proponía el PSOE como delación popular, es opinar, se escuchará en la sala al expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy y a buena parte de su cúpula.
En una resolución a la que tuvo camino torrevieja news today, los magistrados aprueban que se practique la afirmación de los 50 testigos que proponían y entre los que figuran encima la que era secretaria genérico de los populares, María Dolores de Cospedal, el exministro del Interior Juan Ignacio Zoido y el exdirector genérico de la Policía Franquista, Ignacio Cosidó, que no llegó a estar imputado por estos hechos, que tuvieron área cuando estaba en el cargo.
Además solicitó la citación como testimonio del ex maestro madrileño de Neutralidad Enrique López y los secretarios de Estado José Antonio Nieto e Ignacio Ulloa, entre otros, que se suman a la de la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría, cuya testifical fue solicitada por Podemos, de acuerdo al escrito de delación que citó Ep, y que incluso ha sido aceptada.
La Sala sólo ha desestimado las pretensiones de ambas acusaciones sobre testigos en lo tocante a una serie de periodistas que querían incluso escuchar durante el sumario y que se han rechazado porque «se prostitución de profesionales de la información que no participaron en los hechos enjuiciados, sino que comunicaron los extremos que consideraron oportunos».
Con un razonamiento análogo se ha rechazado incluso la petición de la defensa del exsecretario de Estado Francisco Martínez de clamar a informar al primer fiscal de Anticorrupción que tuvo el caso Villarejo, Ignacio Stampa y al ministro del Interior Fernando Prócer-Marlaska. Considera que son «declaraciones innecesarias e inútiles a los fines de este procedimiento».
Operación Kitchen es el nombre popular de la dormitorio separada número 7 del caso que investiga las actividades del comisario retirado José Manuel Villarejo y hasta ahora, la que ha tenido más luces en términos políticos, porque lleva a sumario a la cúpula de Interior en la época de Rajoy por un supuesto espionaje al entonces tesorero del PP, Luis Bárcenas, en teoría, para bloquear el avance del caso Gürtel.
En el banquillo se sientan encima del polémico policía, el mencionado ex secretario de Estado, el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz, el entonces director Adjunto Activo de la Policía Franquista, Eugenio Pino; el que fue principal de Asuntos Internos, Marcelino Martín Blas, los incluso comisarios Andrés Gómez Notable y José Luis Olivera, y los jefes policiales José Donosura Fuentes Gago y Bonifacio Díez Sevillano, anejo al chófer de la comunidad de Luis Bárcenas, Sergio Ríos Esgueva. Las peticiones de penas superan los 15 primaveras de calabozo.