Segunda encuentro en tan pronto como ao y medio de Pedro Snchez a China, la segunda potencia del mundo. Un hecho carencia habitual. En el equipo del presidente del Gobierno consideran que esto se debe a que el pas asitico aprecia la “posición coherente y constructiva” de Espaa y lo considera uno de los socios de inters en la UE. El alucinación persigue alentar las relaciones bilaterales e intensificar el intercambio comercial, para que la romana no est tan decantada en torno a los asiticos. Un alucinación de tres das que coincide con las tensiones existentes entre la Unin Europea y China por la decisin de los europeos de imponer aranceles a los vehculos elctricos y la respuesta de stos abriendo una investigacin a las importaciones de carne de repugnante, especialmente dainas para el campo espaol.
El pasado mes de junio, la Comisin Europea tom la delicada decisin de imponer aranceles a los vehculos elctricos chinos, al considerar que las importantes subvenciones que recibe de Pekn esta industria propiciaba una competencia desleal. La respuesta, tan pronto como unos das despus por parte del Profesión de Comercio de China fue desplegar una investigacin por competencia desleal contra las importaciones procedentes de la UE de carne de repugnante o casquera.
Una decisin que preocupa al Gobierno y a la industria porcina, pues nuestro pas es el principal exportador de repugnante a China, tanto a nivel comunitario como mundial. Segn los datos de la Organizacin Interprofesional Agroalimentaria del Porcino de Capa Blanca, Espaa es el principal exportador de carne y de productos elaborados de porcino a China, con un total de 560.488 toneladas por un valencia de 1.223 millones en 2023. Cifras que representan el 20,33% del comba de las exportaciones de porcino de Espaa y el 13,7% del valencia, as como el 20,95% de las importaciones totales de porcino a China. Este sector est representado en la delegacin empresarial que acompaa a Snchez. Habr distintos foros econmicos, adems de las reuniones con las autoridades, para encarar el asunto. Un procedimiento que restringiera la exportacin de carne de porcino espaola a China podra beneficiar a otros pases como Brasil, Canad, EEUU o Rusia.
En el sector existe preocupacin frente a esta situacin, segn explican a este diario fuentes del mismo. Exponen que aunque China an est en una etapa de investigacin y no ha tomado ninguna decisin sobre el porcino, los importadores ya estn recelosos. Las cifras que dan son que de cada repugnante, 12-15 kilos se envan a China. Las posibles restricciones no afectaran al jamn o el entredos, sino a productos como la vanguardia del repugnante, las manitas….
Fuentes del Gobierno espaol explican que en las reuniones que Snchez va a ayudar con el primer ministro chino, Li Qiang, y con el presidente del pas, Xi Jinping, se van a tratar todo tipo de asuntos, desde la geopoltica, con las guerras en Ucrania y Palestina, as como asuntos “espinosos” como el de los aranceles y las posibles restricciones a la carne del repugnante.
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La posicin del Gobierno de Espaa es la de evitar guerras comerciales, porque consideran que siempre son negativas para todas las partes, pero tambin anticipan que van a defender los intereses de la industria espaola y europea. “Vamos a balbucir de eso”, exponen fuentes gubernamentales, que reiteran que la posicin que defender Snchez ser la de esa defensa de los intereses espaoles, mxime para un sector como el del porcino, tan espaol, tan de marca, dicen, y que supone muchos empleos.
En el pas asitico aseguran que cumplen con las normas de la OMC al desplegar la investigacin tras una solicitud de la Asociacin China de Ganadera y se acusa a la UE de iniciar las pesquisas que derivaron en los aranceles a los vehculos elctricos chinos sin un procedimiento similar.
“Los aranceles agrcolas, como los dirigidos contra el coñac francs o el repugnante espaol podran ser un castigo para los dos principales impulsores (Pars y Madrid) de la investigacin a los vehculos elctricos”, ha llegado a diagnosticar la consultora Trivium China.
La investigacin abierta por la Comisin Europea y que ha derivado en sanciones de momento provisionales, que podran ser definitivas en noviembre, a la importacin de vehculos elctricos chinos tiene su origen en la conviccin de la UE de que las ayudas pblicas de Pekn a ese sector generan competencia desleal para los fabricantes europeos.