El arbitrio de inconstitucionalidad que ha ratificado este lunes formalizar el Consejo de Gobierno de la Corporación de Andalucía contra la ley de gracia en el Tribunal Constitucional (TC) ha recaído en el magistrado del ala conservadora Ricardo Enríquez.
Así se ha conocido el mismo día en que cinco de las comunidades autónomas gobernadas por el PP -Andalucía, Aragón, Madrid, Cantabria y Murcia-, más Castilla-La Mancha, presidida por el socialista Emiliano García-Page, han presentado este lunes posibles de inconstitucionalidad contra la ley de gracia, sumándose así al formulado el pasado jueves por el propio PP y a la cuestión de inconstitucionalidad planteada por el Supremo.
La corte de garantías ha repartido el trabajo este mismo lunes. El recién llegado al TC, el magistrado conservador José María Macías, será el ponente del arbitrio de inconstitucionalidad presentado por el PP, cuya admisibilidad se verá en el Pleno agendado para el 24 de septiembre. La ponencia de Macías marcará la pauta en este asunto, que luego tendrá que votarse en un Pleno con mayoría progresista.
La cuestión de inconstitucionalidad del Supremo, por otro costado, está en manos del magistrado conservador Ricardo Enríquez. Y, previsiblemente, se admitirá a trámite en el Pleno que se celebrará desde este martes.
Al exministro de Razón Juan Carlos Campo le han adjudicado el arbitrio de Cantabria, conforme al turno establecido. Sin confiscación, fuentes del TC consultadas por Europa Press avanzan que el que fuera miembro del Gobierno de Pedro Sánchez se abstendrá, por lo que la ponencia recaerá sobre el futuro magistrado en la registro, el conservador César Tolosa. Campo ya se ha abstenido en los dos asuntos relativos a la gracia que estaban hasta ahora en el TC.