Cuando se acaba la pauta de un medicamento pero todavía queda producto, se guarnición. Eso está claro. Lo que no está tan claro es si, una vez caduca el fármaco, se suele tirar. En la provincia de Ourense los colegios de médicos, enfermeros y farmacéuticos tenían la misma duda y han llegado a la conclusión de que muchos ourensanos conservan productos caducados que, por otra parte de no ser aperos para ninguna dolencia, son peligrosos para la salubridad e incluso para el medio medio ambiente.
Bajo este pretexto, dichos grupos profesionales han puesto en marcha la campaña emplazamiento ‘Revisa los medicamentos de casa’. Una campaña, según el vicepresidente del Colegio Médico de Ourense José Luis Jiménez Martínez, “tan necesaria como interesante”. El material esquema e informativo de la campaña figurará en todos los centros relacionados con la sanidad: centros de salubridad, hospitales, consultas médicas y de botiquín, clínicas públicas y privadas de toda la provincia.
Se informa pues de que se revisen los medicamentos que se guardan en los botiquines caseros, pues se suelen acumular algunos que terminan por caducar. El problema radica en que no solo pierden la efectividad, sino que, al estar al talento de todos los miembros familiares, todavía pueden utilizarlos erróneamente para automedicarse. Así, el peligro retrete es evidente.
El vicepresidente del Colegio Médico de Ourense hace hincapié en los principales problemas: “Por un banda, la seguridad del paciente, porque puede equivocarse” al acumular tanta prescripción, a lo que añade que “esto ocurre sobre todo en un entorno como el nuestro, en el que la demografía es la que es, tenemos muchos ancianos y muchos viven solos”. Por otra parte, el doctor destaca que todo ello se agrava teniendo en cuenta cómo son las prescripciones médicas, a veces difícilmente comprensibles para quien no pertenece al colegio profesional.
Por otro banda, el vicepresidente destaca que “el reciclaje siquiera se realiza como debe”. Y es que los medicamentos contienen ciertas sustancias que necesitan un tratamiento para evitar su filtración al suelo y a masas de agua, contaminándolas y provocando un problema de salubridad pública. A pesar de que, señala el vicepresidente, “existe un utensilio de éxito como es el Sigre”, un estafermo sin humor de interés que recicla medicamentos que se depositan en puntos instalados en farmacias de todo España.
Depósitos para estos medicamentos caducados
A través de la campaña, los sanitarios todavía pretenden que, al revisar sus medicamentos, los pacientes descarten los caducados y los depositen en los puntos Sigre, de modo que se descartan los problemas para el paciente y para el medio. Es necesario informarse de qué se puede tirar y qué no en los depósitos: las agujas, termómetros, gasas, radiografías o mascarillas, por ejemplo, no pueden recogerse en estos puntos.
Es importante, por otra parte de contar con los documentos informativos, que el libre todavía se involucre en la tarea de educar y formar al paciente en esta dirección y que los animen a revisar sus botiquines.
Desde los colegios profesionales del colegio profesional ourensano pretenden poder ampliar esta campaña a todo Galicia, dada su importancia.
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