La ingesta de medicamentos ha surgido como la principal hipótesis en la investigación sobre la asesinato de Raquel B. L., de 54 primaveras, cuyo muerto fue hallado en un hoyo de su domicilio en Villalbilla, Madrid. El noticia preliminar de la necropsia no mostró signos de violencia externa, lo que ha llevado a los investigadores a alumbrar su atención en la posibilidad de que la víctima falleciera por una sobredosis de fármacos, según fuentes cercanas a la investigación.
Prisión provisional para su marido
El marido de la fallecida, quien fue detenido tras el hallazgo del cuerpo el pasado domingo, ha sido enviado a prisión provisional comunicada y sin fianza por orden del Curia de Instrucción número 6 de Alcalá de Henares. El sentenciador le imputa inicialmente un delito de homicidio o inducción al suicidio, aunque la calificación podría variar a medida que avance la investigación procesal. Según el Tribunal Superior de Neutralidad de Madrid (TSJM), las diligencias que se están llevando a lugar podrían modificar la dirección de la causa.
En su testimonio delante el sentenciador, el destacado negó ser responsable de la asesinato de su esposa, afirmando que había reportado su desaparición el 31 de agosto, cuando ella supuestamente se dirigía a la aldea toledana de Yuncos para saludar a su matriz durante las fiestas del pueblo. Según su lectura, perdió contacto con ella tras una última llamamiento telefónica esa mañana, lo que motivó la denuncia de desaparición. Sin retención, tras encontrar el cuerpo sin vida de Raquel en su propio domicilio, la Vigilancia Civil arrestó al hombre al considerar inconsistentes sus declaraciones.
La mujer intentó quitarse la vida en dos ocasiones
El delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, ha informado que la principal hipótesis que manejan los investigadores es que la asesinato se produjo por la ingesta de medicamentos. La investigación, a la dilación de los resultados toxicológicos, ha revelado que la mujer había intentado quitarse la vida en al menos dos ocasiones previas, poco que el destacado mencionó durante su denuncia. En mayo, Raquel estuvo una semana ingresada en un hospital tras ingerir unas 60 pastillas de antidepresivos.
A pesar de la detención del marido, no se habían registrado denuncias previas por violencia de artículos ni siquiera constaban referencias en el sistema VioGén, que se utiliza para hacer seguimiento a casos de violencia machista. Adicionalmente, la pareja no tenía hijos en global, lo que ha complicado aún más el descomposición del entorno general y relacional de la víctima.
El Curia de Violencia sobre la Mujer número 1 de Alcalá de Henares asumirá la instrucción del caso en las próximas semanas, una vez que se completen las primeras diligencias. Por su parte, el Servicio de Igualdad, a través de la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Productos, ha comenzado a obtener información para determinar si este caso puede ser considerado como un crimen machista.
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