“Os comuneiros piden 5 veces máis do actual”

“No tenemos ninguna objeción a publicar un precio más alto, pero Nos pidieron cinco veces el precio que pagábamos“, comenzó así Rogelio López, presidente del grupo Irosa-Samaca, acompañado de dos directivos de ambas empresas, David Vidal y Manuel Pérez, respectivamente, con las explicaciones que el grupo quiso dar públicamente, ante el xerado conflicto. o subasta del contrato de arrendamiento de dos terrenos de la Comunidad de Montes de Portela e Trigal, que terminó sin una orden de desalojo. Las condiciones, según ha explicado, son “4.500 euros por hectárea y año, con un plazo de cinco años y la imposibilidad de transferir estos contratos a terceros”. Pero El problema, según el relato, no es sólo el precio, sino “las condiciones que se nos exigieron para renovar el contrato”. que incluyen “el reconocimiento de la propiedad de todos los terrenos en los que se construyen las fábricas, tanto las propiedades de Irosa como las de Samaca”.

El director de Samaca, Manuel Pérez, fue el encargado de explicar las condiciones del contrato. Con un documento manuscrito del abogado José Antonio Iglesias en Man, explicó que la Comunidade de Montes también esixe o grupo empresarial bajo la condición de “no promover ningún expediente de declaración de utilidad pública”. ni ahora ni en el futuro, estableciéndose una indemnización de 500 mil euros en caso de incumplimiento de esta cláusula.”

tiempo de reacción

El presidente del grupo instituyó dos actos apresuradamente, porque “no esperaron nuestra respuesta, ni nos dieron tiempo para hacer nuestra propuesta; No puedes decirme que no quiero flaquear ni negociar.“A los cuatro días presentaron una solicitud de desalojo ante el tribunal”. López entiende que están pidiendo “no” o no podemos aceptar, porque se trata de entregar 14 edificios entre bodegas, fábricas, comedores, oficinas, etc. que tenemos actualmente”. E insistió en que, “por mucho que ahora digan que no queremos pagar, que nos pidan lo mismo que a todos, no le piden a ninguna empresa el precio que nos piden ni que nos entreguen las propiedades”. construido sobre las montañas y sobre las granjas.” ”.

Como las empresas enfrentan ahora una situación difícil e incierta, “nos han concedido la expropiación, no hemos pagado dos terrenos en el certificado de pago, tenemos un certificado de ocupación y creímos que ese era el fin del problema. Pero no es así. Ahora vemos que han obtenido sentencia favorable para rescindir el contrato de arrendamiento, a pesar de que estamos en posesión al 100% de dos terrenos; No quieren reconocer ni la propiedad del terreno ni la validez de la expropiación”.

En la audiencia, los directivos del grupo expusieron su desconfianza en el proceso de incorporación de comuneros, “porque buscan la mayoría para controlar a la población”.