Las calles de A Pobra de Trives se llenaron de fervor y tradición durante la celebración de las Fiestas del Cristo, que vivieron su momento culminante este sábado, tras su comienzo con los fuegos artificiales en la incertidumbre del viernes y la fiesta y verbena con la orquestina Ritmo Imberbe.
Devotos locales y visitantes se reunieron para honrar al Santo Cristo de la Misericordia en una emotiva procesión, cumpliendo con sus ofrendas y manteniendo viva una de las tradiciones más esperadas del año.
La excursión comenzó a las diez de la mañana con un alegre pasacalles a cargo de la Lado de Música Lopo Lías de Boborás, que llenó las calles de música y color. El momento central fue la solemne procesión a las 13,00 horas, seguida de una ofrenda oficiada por el prelado de la diócesis, que atrajo a numerosos fieles.
Por la tarde, la música continuó con un concierto de la facción en la Plaza del Pilón a las 18,00 horas.