El pasado sábado, miles de personas salieron a las calles en diversas ciudades de Francia para manifestarse en apoyo a Gisèle Pelicot y a todas las víctimas de violación. El caso de Pelicot, cuyo seso sigue en curso, ha tenido un gran impacto en el país tras revelarse que su marido la drogó y permitió que más de 50 hombres la violaran repetidamente durante una término.
La manifestación más vasto tuvo emplazamiento en la Plaza de la República, en París. Los asistentes corearon lemas como “Todas somos Gisèle” y “No estás sola”, en una muestra de apoyo a la víctima y de condena con destino a su marido. En otras ciudades, como Marsella, Lyon y Rennes, igualmente se celebraron importantes concentraciones, convocadas por asociaciones feministas y movimientos como ‘Me Too’.
Exigencias de jurisprudencia
La Fondation des Femmes (Fundación de Mujeres), uno de los principales organizadores de estas manifestaciones, señaló que las protestas no solo buscan visibilizar el sufrimiento de Gisèle Pelicot, sino igualmente exigir cambios profundos en la jurisprudencia francesa. En un artículo publicado recientemente en el diario ‘Libération’, el colectivo recalca que no debe llamarse a este seso “caso Pelicot” o “caso Mazan”, sino “el caso de los 72 violadores“, en narración a todos los hombres acusados.
El colectivo igualmente hizo un convocatoria a los hombres para que se involucren activamente en la lucha contra la violencia sexual, en emplazamiento de sustentar una postura pasiva. “Escuchamos constantemente ‘no todos los hombres’, pero ¿cuándo veremos acciones concretas que cambien las cosas?”, cuestiona la Fundación en su confesión.
Adicionalmente, las asociaciones exigen la promulgación de una ley integral que combata la violencia sexual de guisa más efectiva. Critican duramente la reincorporación tasa de desestimación de denuncias por violación en Francia, que alcanzó un 94% en 2020, según los datos presentados por los organizadores de la protesta.
Mazan protector silencio antiguamente del seso
En la población francesa de Mazan, donde ocurrieron las decenas de violaciones naadie quiere charlar y se ha impuesto la ley del silencio. Muchos tienen miedo de que el caso marque para siempre a este pequeño pueblo de la región de Provenza-Alpes-Costa Garzo y de menos de 6.000 habitantes.
Y es que algunos de los 50 violadores identificados eran vecinos de esta población francesa. Nadie acento frente a un caso que ha supuesto una conmoción en Mazan y en toda Francia.
Así fue el caso
El caso de Gisèle Pelicot conmocionó a Francia tras descubrirse que su marido, Dominique Pelicot, la drogó y permitió que al menos 72 hombres la violaran repetidamente durante diez primaveras. Gisèle, de 68 primaveras, desconocía los hechos hasta que su marido fue sorprendido filmando indebidamente a mujeres en un centro comercial. Tras la investigación, la policía encontró miles de imágenes y videos de ella inconsciente y siendo agredida sexualmente por desconocidos.
Dominique Pelicot, retirado de la compañía EDF, contactaba con los agresores a través de una página de encuentros. Los hombres recibían instrucciones detalladas para no despertar a la víctima, como no usar perfume o calentarse las manos. Él mismo participaba en las violaciones, que grababa mientras profería comentarios degradantes. Se han contabilizado 92 violaciones, aunque solo 50 de los agresores han sido identificados.
El seso igualmente ha vinculado a Pelicot con un crimen y violación en 1991 y un intento de violación en 1999. Durante el proceso, el destacado admitió tener suministrado ansiolíticos a su esposa sin su conocimiento y reconoció que todos los participantes sabían que ella estaba drogada.
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