Que la relación entre PP y Vox no atraviesa su mejor momento no es una novedad. La trámite de la inmigración irregular fue la que provocó en el mes de julio una ruptura en las comunidades autónomas y sigue siendo el asunto que más enturbia el trato entre las sedes de las calles Génova y Bambú.
Este martes uno y otro partidos han exhibido su distancia en el Congreso, donde los de Santiago Abascal han votado en contra de una moción de los populares que pedía al Gobierno la confesión de la situación de emergencia migratoria. La iniciativa no hubiera saliente delante aunque Vox hubiera votado a patrocinio, pero es una muestra de lo remotamente que están ambas formaciones en un asunto que protagoniza el debate político contemporáneo.
La diputada del PP Isabel Sánchez Torregrosa se ha dedicado a desgranar las propuestas de su partido delante «el caos y la improvisación» del Gobierno: reunir a las comunidades autónomas, aumentar sus capital, mejorar los efectivos y medios de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, acudir a Frontex, la agencia europea de trámite de fronteras,…
Toda una condensador de medidas que, cuando ha llegado su turno, el diputado de Vox José María Sánchez García no ha dudado en tildar de «tonterías». «Todas son innecesarias, no sirven para falta», ha despreciado acusando al PP de dialogar de inmigración porque cree que puede sacar «beneficio electoral» de ello, coincidiendo con el perforación del CIS que señala el engendro como la principal preocupación de los españoles.
Para Sánchez García, el principal problema de los populares es que «son multiculturalistas», un término que para Vox «no es un valía» y, es más, puede ser «un aventura para la esencia de las naciones». A estas palabras ha reaccionado la diputada de Sumar Tesh Sidi, de origen saharaui. «Que se vaya usted acostumbrando al multiculturalismo. A esta diputada la han votado más de 700.000 madrileños para compartir escaño con usted», le ha recomendado la parlamentaria de Más Madrid.
Pero el diputado de Vox no solo ha cargado contra el PP, todavía ha dirigido duras críticas a la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, que poco antaño había comparecido en el mismo hemiciclo para defender la política migratoria del Gobierno.
«Esta ministra es una exhibición de ignorancia, ha dicho disparates -ha cargado Sánchez García-. Esta señora no sabe falta, no sabe de lo que está hablando y encima tiene una inclinación iconoclasta de designar la atención sobre su desconocimiento de la cartera que representa».