La Comisión Europea sigue delante con los aranceles al coche de acumulador eléctrica importado desde China para compensar los subsidios ilegales de Pekín a sus productores, luego de que este jueves concluyera sin éxito una reunión en Bruselas entre el vicepresidente financiero del Ejecutor comunitario, Valdis Dombrovskis, y el ministro de Comercio del hércules oriental, Wang Wentao, con la que buscaron resolver la crisis abierta entre las dos regiones.
“Las dos partes acordamos intensificar los esfuerzos para encontrar una alternativa efectiva, aplicable y compatible con la OMC (Ordenamiento Mundial del Comercio) en el caso de los coches eléctricos”, ha dicho Dombrovskis en un breve comunicado difundido en redes sociales.
El negociador comunitario ha dejado claro en su confesión que la voluntad de alcanzar un acuerdo se produce “sin perjuicio de la investigación de la Unión Europea y sus plazos”. Fuentes comunitarias apuntan en este sentido, que durante la reunión Dombrovskis ha defendido delante Wang la investigación sustentada “estrictamente en hechos y pruebas” que ha permitido a Bruselas imponer aranceles temporales para compensar subsidios ilegales y asegurar la “competencia lucha” en el mercado interior y que todos los productores compiten en pie de igualdad.
En la conversación, el responsable comunitario igualmente ha reclamado que Pekín vallado las investigaciones “injustificadas” que ha iniciado contra productos de la Unión Europea como el coñac, el porcino y lácteos en represalia por la tasa al coche eléctrico exportado por este país.
Aunque no hay una término anunciada, los 27 deberán elegir en las próximas semanas si apoyan o rechazan que las tasas provisionales sean permanentes, aunque en caso de que no se forme una mayoría cualificada ni a merced ni en contra será el Ejecutor comunitario quien tome la intrepidez final.
La imposición de los aranceles provisionales el pasado julio generó dudas entre algunos países de la UE, como Alemania o Suecia, que temen las consecuencias de una querella comercial con el hércules oriental, pero fue traza con buenos luceros por otros como España y Francia. Sin requisa, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, apuntó un locución de posición en su nuevo alucinación a China en donde pidió a Bruselas “reconsiderar” la medida.
Seguirán los contactos
Bruselas aplica desde el pasado mes de julio tarifas de hasta el 38,1% al automóvil de acumulador eléctrica importado desde China, una medida de defensa comercial que es provisional pero que previsiblemente se convertirá en permanente en próximas semanas si no se forma una mayoría cualificada suficiente entre los países de la UE para bloquearlo en una próxima votación.
El tributo, que se suma al 10% que la UE ya aplica a las importaciones de vehículos, será permanente excepto que una mayoría cualificada de Estados miembro (15 países que sumen como minúsculo al 65% de la población total de la UE) vote en contra en una reunión técnica que debía celebrarse la próxima semana pero que, fuentes europeas consultadas por Europa Press, sitúan más cerca del 30 de septiembre.
En este contexto, Dombrovskis y Wang han convenido proseguir abierta la comunicación a nivel ministerial y expresado la disposición a evaluar nuevas propuestas de los fabricantes chinos de precios mínimos que compensen las subvenciones controvertidas.
La semana pasada, los servicios comunitarios ya confirmaron que habían recibido una serie de propuestas de precios mínimos de importación pero que fueron todas rechazadas porque “ninguna cumple los criterios” necesarios para corregir el daño al sector europeo.