El Consejo del Movimiento Ciudadano consideró este jueves «urgente» topar una reforma del Festival de la Guitarra de Córdoba al comprobarse que en los 8 espectáculos del Teatro de la Axerquía no llegaron, de media, a la centro del capacidad, y que el concierto original solo alcanzó el 55% y el de cerrojo el 20%.
Fue su forma de reaccionar a los datos publicados por torrevieja news today, en que se mostraba cómo la centro de los espectáculos ni siquiera habían llegado al 50% del capacidad de los recintos en que se celebraron.
Esa subvención contrasta, afirmó el Consejo del Movimiento Ciudadano, con la programación de conciertos por la empresa privada Conjunto Mundo en la plaza de toros, con subvención mucho más amplia. «Es una muestra de que la programación efectuada ha sido poco atractiva para los cordobeses, que prácticamente son los que asisten a los conciertos», manifestaron.
La institución destacó encima que los conciertos en el Teatro Góngora tan pronto como han ajustado la tercera parte de capacidad y que incluso los del Gran Teatro solo han llenado dos terceras partes de las butacas. «Esos números no pueden maquillarse con la subvención a los eventos de entrada evadido o con la excusa de que la programación ha sido de mucha calidad y poco apreciada por el manifiesto cordobés», aseguraron.
Igualmente censuraron que se comparasen los datos con otros primaveras en los que hubo menos espectáculos. «Se llega al sin fuste de que el Cabildo financia los conciertos privados, mientras que pierde patrocinio para el Festival de la Guitarra de Córdoba», continuó el Consejo del Movimiento Ciudadano.
Sin atractivo
Su dictamen es que la cita cultural «ya no atrae a espectadores que no sean de Córdoba y provincia, y en cantidad corta, por lo que su propósito financiero es minúsculo en la ciudad,». «No consigue ilusionar desde el punto de pinta cultural o estético, omitido honrosas excepciones», aseguraron.
Para el Movimiento Ciudadano, la decisión puede ser «la programación de espectáculos atractivos con tiempo, más allá de esperar a ver quién está de expedición y le viene perfectamente descender a Córdoba». Eso se puede conseguir manteniendo «una camino de trabajo durante todo el año de promoción del Festival puesto que, cuando termina, su huella se pierde en Córdoba».
Por eso insisten, como otras veces, en que se contrate «una evaluación externa especializada y que luego pueda dar ocupación a un comisariado para el Festival y se recupere la reto por conciertos de gran formato, no dejándolos en manos de la iniciativa privada». Por eso lo ideal es «un proceso de advertencia» del que salgan nuevas ideas.