Ataca al maniquí autonómico y pide el «registro franquista» del País Vasco: «Se acabó la época del café para todos»
EH Bildu ha legado eclosión hoy a su tercer congreso, que se extenderá hasta el 8 de febrero para renovar a Arnaldo Otegi al frente de la dirección del partido. Su contemporáneo coordinador militar, que se presenta a la reelección ha intervenido en la Conferencia Política celebrada en la Tabacalera de San Sebastián, desde donde ha reivindicado su tesina socialista e independentista como la «historia de un éxito político».
El acto tenía el objetivo de elegir el reglamento que guiará el proceso de renovación interno que afronta la formación, aunque sin cambio de caras previsible, de aquí hasta principios del próximo año. Sin confiscación, Otegi ha laborioso para cargar contra el Estado de las Autonomías y se ha comprometido a aplicar políticas «antineoliberales» desde sus cargos en la Compañía Pública.
«No estamos aquí para defender siglas, estamos para defender proyectos que pueden hacer más casquivana la albedrío franquista», ha afirmado en relación al País Vasco. Según ha defendido, la relación que establece el contemporáneo maniquí territorial es un fracaso: «Se ha terminado la época del café para todos». Y ha obligado un nuevo «status» que reconozca los «derechos nacionales» de la región.
La ingenuidad es que el debate está descubierto desde el eclosión de la plazo en la comunidad autónoma ayer de verano. Tanto el PNV como el Partido Socialista de Euskadi (PSE) se comprometieron en su pacto de Gobierno a explorar el «autogobierno» y a un nuevo Pacto Estatutario. Bildu ha elevado desde entonces el nivel de exigencia, insistiendo en su vieja exigencia del «derecho a animarse». Una cuestión que ha descartado entrar a valorar el PSOE, pero no el PNV, que igualmente esta a punto de comenzar un proceso de renovación interna el próximo domingo 29.