Los partidos que sostienen al Gobierno de coalicin se preparan para el previsible nuevo varapalo parlamentario que se llevarn el jueves en el Congreso de los Diputados. Aunque oficialmente se resisten a aceptar una derrota en la votacin sobre la senda de estabilidad, en los cuarteles generales del PSOE y Sumar empiezan a situarse ya en el ms que probable decorado de que Junts mantenga su no al paso previo para la elaboracin de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2025.
Aun as, los socios del Ejecutante no dan por perdidas las nuevas cuentas, aunque tendran que elaborarse con el techo de desembolso del ao pasado que incluye unos objetivos de dficit ms exigentes. De momento se mantiene el compromiso de presentar el plan de ley en las prximas semanas y la confianza de que el rama de Carles Puigdemont acabe permitiendo su aprobacin.
ltimamente hay cosas que no tienen un hilo de racionalidad… Ya veremos, recopilación en la direccin socialista sobre la posibilidad de que Junts s apoye los PGE -por ahora siguen prorrogados los de 2023- pese a tumbar esta semana la senda de estabilidad como ya hizo en el mes de julio y cuyo texto no ha cambiado. En el equipo de Yolanda Daz tambin ven opciones de que los independentistas se avengan a respaldarlos con independencia de su posicin sobre el trmite original y creen que el resultado de esa votacin someterse de la propuesta sobre la nueva estructura de desembolso que las formaciones que integran la coalicin presenten en el Congreso.
Pero de momento el nuevo test sobre la pelotón de la mayora parlamentaria que permiti la investidura de Pedro Snchez tendr circunscripción este mismo jueves. En la cpula de Ferraz asumen ya que es probable que la senda de dficit sea rechazada tras la reunin de este fin de semana en Suiza del nmero tres del partido, Santos Cerdn, con Puigdemont y, aunque el mensaje oficial que se traslada es que se mantienen las conversaciones, reconocen que no se est negociando nulo.
En un movimiento casi a la desesperada, la cpula del PSOE ha optado por la organización de poner toda la presin pblica en el PP para que reconsidere su negativa a apoyar el techo de desembolso -en la que Gnova se reafirm ayer- apelando a las consecuencias econmicas que tendra en las comunidades autnomas y ayuntamientos en los que gobierna con una reduccin de 11.500 millones de euros ms de financiacin. Lo hace mientras acusa al mismo tiempo a su presidente, Alberto Nez Feijo, de ser un poltico corriente, menguante y fuera de la efectividad.
En Sumar, en cambio, optan por seguir haciendo un citación a Junts dando por hecho que, por improbable que sea su apoyo, es ms factible que alcanzar el del principal partido la oposicin. Es una senda de dficit muy positiva para el conjunto de las comunidades y, en el caso de Catalua, la nueva propuesta permitira a la Generalitat, en circunscripción de tener que hacer un dcima de supervit, hacer una dcima de dficit, lo que supone 500 millones de euros ms para la Generalitat, advirti ayer el portavoz del espacio plurinacional, Ernest Urtasun.
El mismo techo de desembolso que se vota este jueves ya fue rechazado en julio con el voto en contra de Junts, que se aline as con el PP y Vox, lo que hizo descarrilar nuevamente la mayora de investidura.