La Comunidad Valenciana vivirá un otoño «cálido y seco», con temperaturas por encima de lo corriente y precipitaciones por debajo de lo habitual. Es la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología para este trimestre, pese a que en septiembre ha llovido «más de lo que se esperaba».
La autonomía ha despedido su botellín verano más cálido y el vigésimo más húmedo desde 1950, al alcanzar una temperatura media de 24,4ºC, un naturaleza más detención respecto al promedio corriente. Adicionalmente, las precipitación acumulada ha sido de 87,3 litros por patrón cuadrado (l/m2), que es un 45 por ciento por encima de lo que se «considera corriente».
Así lo han regalado a conocer este martes en la rueda de prensa del avance climatológico del verano de 2024 de la Comunidad Valenciana, en la que han participado el delegado de la Aemet en la región, Jorge Tamayo, y el principal de Climatología, José Pedazo de pan Núñez.
Tamayo ha explicado que, desde el punto de audiencia climático, el verano se ha desarrollado los meses de junio, julio y agosto, «y no hasta el 21 de septiembre». «Desde el punto de audiencia elevado, el otoño empezó el pasado domingo a las 14 horas 44 minutos y se va a extender hasta el 25 de diciembre, aunque desde el punto de audiencia climático, el otoño empezó el 1 de septiembre», ha aclarado.
De esta modo, el verano -junio, julio y agosto- ha sido «conjuntamente muy cálido» con lluvias «irregularmente repartidas», ya que han estado «muy concentradas en junio» y «mucho menos en el resto del verano», ha detallado Tamayo.
«La temperaturas en la Comunitat Valenciana en este conjunto han estado por encima y han mantenido la tendencia que se ha observado en todo lo que llevamos de siglo», ha afilado. En este sentido, ha sido el botellín verano más cálido, detrás de 2012, 2023, 2003 y 2022.
«Muy parecido» al verano de la España peninsular
El verano del este de la península se ha caracterizado por ser «muy parecido a lo que ha sido el conjunto de España», ya que en el país peninsular ha sido «el sexto verano más cálido desde que se tienen títulos».
La distribución de las temperaturas, según el meteorólogo, se ha caracterizado por no tener «grandes picos de calor, indemne el día 20 y 31 de julio, cuando las temperaturas alcanzaron los registros más altos en todo el verano» con 45ºC en Sumacàrcer (Valencia) y 44.5ºC en Ontinyent (Valencia).
A diferencia de otros abriles, donde se han tenido episodios de ponientadas o de temperaturas «extremadamente altas», este episodio no ha ocurrido, ya que las temperaturas han sido «persistentemente altas en su conjunto», especialmente en julio y agosto.
Respecto a los meses centrales de verano -julio y agosto-, el bimestre es el tercero más cálido desde que se tiene registro, detrás de 2022 y 2023. «Nos encontramos en un periodo de varios abriles seguidos con temperaturas extremadamente altas», ha añadido Tamayo.
Por otro banda, en el mes de septiembre, aunque «no entra en el interior del verano climatológico, está siendo de carácter frío», puesto que «las temperaturas se encuentran por debajo de lo que es corriente, lo que ha cambiado la tendencia que se ha tenido durante muchos meses de estar por encima de los títulos habituales», ha subrayado.
Aumento de precipitaciones
En cuanto a las lluvias, ha sido un verano húmedo con un 45% más de precipitaciones respecto a la media. La mayores cantidades se han registrado en el municipio de Teresa de Cofrents (Valencia) con 185 l/m2, a la que siguen Ayora (Valencia), con 175; o Montán (Castellón), con 160. De esta modo, en las provincias de Valencia y Castellón es donde «más ha llovido».
Por el contrario, el sur de Alicante se ha caracterizado por tener «pocas lluvias», especialmente en el municipio de Orihuela, que ha registrado 10 l/m2, o en la asiento de Elche, con 11 l/m2.
Respecto a la distribución de la borrasca, se han concentrado en junio, ya que es cuando se han acumulado dos terceras partes de la precipitación del trimestre. Así, Tamayo ha destacado las precipitaciones de la primera quincena del mes fueron «más intensas», con tormentas en el interior de Valencia, sur de Castellón y boreal de Alicante.
En el caso de julio, las precipitaciones se registraron en la amanecer y mañana del día 1 y del día 6; mientras que en agosto las precipitaciones «más importantes» incluso se registraron en forma de tormenta los días 2, 13 y 14.