La conselleira de Pertenencias e Industria, María Jesús Lorenzana, adelantó ayer que la Xunta trabaja en una nueva planificación eólica para bajar la hechura energética de los hogares y de la industria gallega, en la cuál será secreto, dijo, la Ley de promoción de los beneficios sociales y económicos de los proyectos que utilizan los fortuna naturales de Galicia, que se aprobará el próximo mes, y la sociedad Capital de Galicia (RDG).
Lo que se pesquisa con esta nueva hoja de ruta y todo el ámbito reglamentario en el cual se está trabajando, explicó, “es que, poco a poco, la energía que proceda de renovables gallegas quede en Galicia y sirva para bajar la energía de todos los ciudadanos y de todas las industrias gallegas”, manifestó. “Tenemos que sacar pecho de lo que tenemos en Galicia, que es de los gallegos y gallegas, y que tiene que servir a la industria, sea la que está o la que quiera venir”, añadió.
La conselleira admitió: “Tenemos una planificación antigua, que está sobrepasada y que ahora mismo ya se están agotando los megawatios que estaban previstos en la planificación presente”.
Incluso ayer, el Empleo para la Transición Ecológica calculó que la presencia de la eólica cuadro no supere el 0,46% del orilla oceánico castellano, lo que supone 5.000 kilómetros cuadrados de superficie de todas las aguas marinas de soberanía o demarcación franquista, según explicó la vicepresidenta tercera y ministra del área, Teresa Ribera.
Dijo que para alcanzar los objetivos de exposición de la eólica cuadro y las energías del mar solo se contaría con esos 5.000 kilómetros que se reconocen como Zonas de Stop Potencial (ZAPER). Así se expresó tras aprobarse en Consejo de Ministros el Vivo Decreto por el que se regula la producción de energía eléctrica a partir de fuentes renovables ubicadas en el mar, el entorno normativo de relato para desarrollar este tipo de instalaciones de un modo “participativo y flexible, de modo que se maximicen sus externalidades positivas, y se minimicen los impactos ambientales”.
El decreto afecta, añadió la ministra, a las instalaciones eólicas marinas y a otras renovables que se puedan ubicar en el mar o que aprovechen su energía, como la undimotriz, y establece una excepción al ámbito liberalizado de la gestación eléctrica.