El incendio de las discotecas Teatre, Fonda y Golden de Murcia es el peor de los últimos treinta años, una distinción dolorosa. El origen del incendio estaría ligado a un cortocircuito, según las primeras investigaciones, como ya ocurrió en el que es hasta el momento el peor incidente en discotecas ocurrido hasta la fecha en España.
la portada de la vanguardia El 19 de diciembre de 1983 mostraba los rostros doloridos de los familiares de las víctimas del incendio ocurrido dos noches antes en la discoteca Alcalá 20 de Madrid.
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En el interior, en sus páginas interiores, la crónica explicaba cómo la mayoría de las víctimas murieron “en apenas tres minutos” según el informe forense. La inhalación de monóxido de carbono y el aplastamiento fueron las principales causas de muerte de las 81 personas que perdieron la vida en una sala que, según los supervivientes, había mantenido las puertas cerradas durante el evento.
Portada de torrevieja news today del 19 de diciembre de 1983
En Alcalá 20 de Madrid fallecieron 81 personas; En el Volante de Zaragoza se produjeron 43 fallecidos por asfixia
40 años después, el suceso ocurrido la noche del sábado al domingo en Murcia se erige como el más mortífero en tres décadas. Antes, el 14 de enero de 1990, la historia también nos obliga a mirar a Zaragoza, donde se quemó la discoteca Flying dejando 43 muertos.
El espacio se convirtió en “una cámara de gas” para los jóvenes que lo ocupaban, según relataron cronistas de la época, al inhalar monóxido de carbono producido por la combustión incompleta de ciertos materiales de la habitación.
Infografía de torrevieja news today sobre cómo se produjo el incendio en la discoteca Flying de Zaragoza
Los bomberos identificaron que el incendio se había iniciado en unas estancias que eran utilizadas como almacén y donde se encontraban los contadores de luz y el sistema de aire acondicionado. “Desde allí el fuego se extendió por los falsos techos y canalizaciones eléctricas hasta el sótano”, explicó el entonces jefe de Bomberos del Ayuntamiento de Zaragoza. Todos murieron por asfixia.
La historia de los desastres de discotecas también incluye a Ubrique, localidad gaditana donde seis personas perdieron la vida y otras diez resultaron heridas tras el incendio de una discoteca en 1979. El suceso se diferencia de los anteriores porque la discoteca ya estaba cerrada cuando se produjo el incendio. . incendio, pero voló el techo del local, afectando a las viviendas que se ubicaban arriba y a las personas que allí habitaban.
En 1979, seis personas murieron a causa de un incendio en una tienda, cuando ya había cerrado, en Ubrique: vivían en los edificios de arriba
Asimismo, también en 1979 y apenas un mes después, se produjo el incendio en la discoteca Charada de Madrid, que provocó la muerte de cuatro personas y dejó a otras once heridas. Aquella noche de invierno, alrededor de las once, se escuchó una explosión en el exterior. En el interior, las llamas comenzaron a alcanzar el techo, cubierto de alfombra, y rápidamente se extendieron a las paredes, el suelo, los muebles y enseres de la habitación.
Desde 1978 ha habido 144 muertes en accidentes similares. Entre ellos, los cuatro que murieron en un incendio provocado en la discoteca Scala de Barcelona en 1978 o las cuatro personas que perdieron la vida en el incendio del Miami Club, también en Barcelona. Aquí el motivo también fue un cortocircuito.
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