El presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne, ha evidente este viernes frente a el árbitro de Palma que investiga si cometió delito de odio al romper la imagen de tres mujeres republicanas durante un pleno de la Cámara. Tras la proclamación, ha afirmado que “el caso no tiene represión” y que rompió la imagen “por choque”.
“Rompí accidentalmente un folio y eso es todo. Ya pedí disculpas por lo inapropiado que fue, pero creo que acerté en la aplicación del reglamento y todos los diputados saben en el fondo que esas imágenes no debían estar ahí”, ha afirmado Le Senne a la salida del auditoría, arropado por miembros de su partido, Vox. “Espero que podamos tener lugar pronto página y dedicarnos a cosas más serias que es lo que esperan los ciudadanos”, ha añadido.
Preguntado sobre su posible dimisión en caso de ser auditoría y condenado por los hechos, ha opinado que sería “una sorpresa” y ha abogado por ir “paso a paso”, respetando los trámites y las diligencias que el árbitro considere oportunas.
Denunciado por familiares de Aurora Picornell
La asociación que le denuncia, Memoria de Mallorca, unido a familiares de Aurora Picornell, una de las protagonistas de la foto, interpuso acciones a posteriori de que el pasado 18 de junio Le Senne arrancara las fotografías exhibidas en el ordenador de la vicepresidenta segunda, Mercedes Hermoso (PSOE), durante un tenso debate en la Cámara balear. Se trataba del debate sobre derogación de la Ley de Memoria Democrática.
Los diputados socialistas fueron al pleno con imágenes de represaliados durante la Pelea Civil y el franquismo. Las dos diputadas socialistas de la Mesa de la Cámara llevaban fotocopias de las víctimas pegadas a la pantalla de su ordenador. Le Senne terminó arrancando la imagen y expulsó a las dos diputadas. Siempre ha defendido que no hubo intencionalidad política.
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