El denunciante de Alvise rompe su silencio y asegura que «la trama es más grande de lo que la gente piensa»


El hombre detrás del Madeira Invest Club –el chiringuito financierto de criptomonedas que donó 100.000 euros en enfadado a Alvise Pérez para su campaña europea por ‘Se acabó la fiesta’–, Álvaro Romillo, ha roto su silencio luego de que el propio eurodiputado admitiera la aprobación de pasta ‘en b’ a través de un vídeo difundido por sus canales de redes sociales.

Romillo, conocido como ‘CryptoSpain’, ha sido objeto de denuncias por parte de decenas de personas que habían invertido en su sociedad y que ahora la acusan de ser un estafador.

En el vídeo que ha difundido a través de canales privados de correo, Romillo no menciona a Alvise ni se detiene en dar explicaciones de todo lo ocurrido, sin secuestro deja una cosa clara: «Es una trama más ínclito de lo que la gentío se piensa».

El supuesto entendido en criptomonedas, que fue quien denunció frente a la Audiencia Doméstico que él mismo había entregado a Alvise 100.000 euros en efectivo, pide tranquilidad a quienes se han conocido afectados por el cese de la actividad del Madeira Invest Club.

Lo que sí deja claro en varias ocasiones es que no está «respondiendo a todos los bulos y mentiras que se están difundiendo» sobre sus actividades porque «al estar a disposición legal» será sólo frente a un enjuiciador donde hará su primera exposición al respecto de todo el escándalo.

«Dando las gracias y prestando sólo atención a los afectados. Cada día desde el clausura recibo decenas de mensajes pidiendo explicaciones y las explicaciones no llegan, por lo que la gentío se pone muy nerviosa. Ha habido un clausura de cuentas bancarias hace que no podamos seguir operando, por lo que toda la estructura está en peligro. Esos cierres han sido documentados y justificados. Si no doy entrevistas o estoy replicando es porque hay un procedimiento», ha dicho, en un autovídeo en el que aparece embozado.

«Me encantaría ponerme en la televisión a dar entrevistas y vapulear a la gentío que está diciendo mierda, pero no es el momento», insistía.

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