Entre Fuente de la Lozanía, las vías del tren, el Zumbacón, la avenida de la Igualdad y el polígono industrial de Chinales se elevación un nuevo y pequeño distrito peculiar por su situación, llano por su disposición y tranquilo por idiosincrasia. Se prostitución de la zona conocida como ‘Tribeka’, por el nombre de alguna de sus urbanizaciones. Los modernos edificios, algunos de ellos decorados de forma muy llamativa con plantas naturales, contrastan con los cercanos y mucho más antiguos de Valdeolleros, generando un contraste vistoso. El sello de Rafael De-La Hoz se aprecia en los bloques con el nombre del distrito neoyorquino. Cada manzana tiene un tonada diferente.
Curiosamente los primeros habitantes de la zona entre las calles Fuente de la Lozanía, Desconocido de las Angustias y Sor Ángela de la Cruz, no fueron los vecinos de los modernos edificios, aún no alzados, sino precisamente las familias del Valdeolleros antiguo. Y es que cuando todo eran solares, grúas y obreros, ya estaban instalados los parques infantiles, por lo que los padres venían aquí con sus hijos a pesar del barullo.
Es el caso de dos madres, Sandra Santiago y Laura de la Fuente: «En Santa Rosa no hay parques, y aquí, cuando todo eran solares, ya habían hecho los parques», explica de la Fuente. «Está más allá el Parque de la Asomadilla, pero para presentarse al parque inmaduro tienes que subir», apunta Santiago. «Y adicionalmente aprovechas el Deza para hacer la negocio», manifiestan ambas.
«En Santa Rosa no hay parques, y aquí, cuando todo eran solares, ya habían hecho los parques infantiles»
Es este supermercado de Fuente de la Lozanía, franco en la primavera del 2023, un trasiego constante de clientes. Por la disposición de los edificios y su carácter, con comunidad en torno a, en la zona de Tribeka escasamente hay puesto para los locales, y por consiguiente para los negocios, fuera de los que abran en edificios colindantes todavía de nuevo construcción. Así que, de momento, está el Deza y la laboratorio de la licenciada Natalia de Alcaraz Montijano. «Empezamos el 24 de julio de 2023», recuerda uno de los encargados de la botica, Fernando Lachica. «Cada vez hay más gentío en el distrito, a la que hay que sumar los clientes que vienen de la zona antigua de Valdeolleros».
Los espectadores del conocido software ‘El encantador de perros’, protagonizado por César Millán, están acostumbrados a ver a este amaestrador a costado de sus patines mientras se desliza tirado por uno o varios animales. Es el caso de Begoña de los Llanos Ortega Centella, que se desplaza como indica su postrer patronímico a modo de particular trineo tirado por sus perros Apolo y Sultana. Vive en uno de los edificios más sugerentes por su aspecto y dedicados al locación, por el que paga 800 euros en un adoquinado de dos habitaciones. Estos inmuebles llaman la atención por su escenografía vegetal. «Soy de Sevilla y he vivido en muchos lugares de España, escogí esta zona porque es un puesto muy tranquilo, sin delincuencia y donde puedes salir de tinieblas sola con o sin perros». Dice salir con ellos en patines para que los animales se ejerciten más, generando esa estampa poco habitual en Córdoba pero que quizá se ponga de moda.
Buscando un puesto nuevo y céntrico
Varios vecinos comentan a torrevieja news today que en este edificio dedicado al locación hay inquilinos ilustres, en concreto dos personas habituales en los programas del corazón en los últimos lustros. Se prostitución de Julián Contreras y su padre, del mismo nombre, hijo y exmarido respectivamente de la malograda Carmina Ordoñez. Los vecinos destacan su amabilidad y llaneza, pues se les puede ver como uno más paseando al perro, esta vez sin patines.
En las zonas verdes comunes entre edificios, un padre juega con un balón de balonvolea con su hija. Son Alberto y Lucía Puertas. «Nos mudamos hace un año, me atrajo que fuese una zona nueva y todavía la nostalgia, porque yo estudié en el Instituto Encanto de Saavedra». La clan pensó al principio en mudarse a la nueva de la Arruzafa, pero vieron el puesto demasiado alejado de todo.
Esta cercanía es precisamente uno de los puntos fuertes que destacan muchas de las personas que se han ido mudando a un distrito en el que todavía se ven un importante número de pisos vacíos que se irán llenando poco a poco. «Vivíamos en Ciudad Pensil, pero escogimos esta zona por su calidad, tranquilidad y porque está cerca del centro», declara Juan José Bersabé, que pasea con su pequeño perro Chucky. Él fue uno de los primeros habitantes del distrito, pues se trasladó el 1 de marzo de 2022. Denuncia, eso sí, algún problema con gamberros que se trasladan para reunirse en las calles, a modo de botellón; y que muchas de las personas que aparcan en el descampado cerca del súper, toman al salir y con destino a el supermercado una dirección prohibida, con el peligro que acarrea para los viandantes. «En ese aspecto echo en desatiendo que la policía se pase un poco más».
«Soy de Sevilla y he vivido en muchos lugares de España, escogí esta zona porque es un puesto muy tranquilo, sin delincuencia y donde puedes salir de tinieblas sola con o sin perros»
Víctor González y María José Rodríguez son pareja y se han mudado desde Mirabueno, aunque por motivos de trabajo se han ido trasladando hasta una docena de veces. Se mudaron el pasado mes de diciembre. Querían cambiar su última casa por un adoquinado, para dejar antes, por ejemplo, las escaleras. «Estamos asaz contentos, aunque ahora tengamos menos espacio», dice González. «Desde en lo alto podemos ver hasta el castillo de Almodóvar, eso sí, en chiquitito», bromea ella en la conversación.
Jesús Velasco todavía lleva viviendo muy poquito por la zona, tan sólo un año. Este cordobés, por motivos de trabajo, venía de Pamplona, y escogió el puesto por la piscina. «Lo que más me gusta del distrito es que es fresco, hace asaz tonada». Y, en objeto, es una zona en la que la brisa corre por todas partes. Agustín Jiménez llega a su portal con su hija Julia. Vivían en el Zumbacón y querían mudarse a un adoquinado más excelso, parada y con terraza. «Lo mejor del distrito son las zonas comunes, su buena comunicación y que tengamos el Deza, aunque esperamos que se urbanice toda la parte que va a la Asomadilla, que está poco destartalada». Aún con varios descampados donde se ha de edificar y una zona prevista para jardines que linda con Chinales, este distrito todavía se puede considerar en construcción. Pero la vida ya llena sus calles.
La matiz de precios
Según un nuevo estudio de la consultora Activum Actual State, Fuente de la Lozanía cuenta actualmente con 1.090 viviendas en expansión, lo que convierte a esta zona en la principal para el expansión inmobiliario y de inversión en Córdoba, puesto que más de la medio del total de nuevas viviendas en la ciudad. Y todo ello en una serie de manzanas muy acotadas, es asegurar, que similar importancia en el mundo de la costrucción se ciñe, en comparación, a un tamaño muy pequeño.
Kronos, Neinor Homes, Efico Homes, Impact Homes, Clan Insur, Vía Célere o Inmoclever son las empresas que han participado en la puesta en marcha de un distrito
Kronos, Neinor Homes, Efico Homes, Impact Homes, Clan Insur, Vía Célere o Inmoclever son las empresas que han participado en la puesta en marcha de un distrito al que todavía le quedan varios edificios por construir. Según este estudio, Un 70% de compradores optan por viviendas de tres dormitorios, seguido por un 20% que prefieren viviendas de dos dormitorios, y un 10% que buscan viviendas de cuatro dormitorios.
En cuanto a los precios medios, alcanzan los 163.350 euros para pisos de un dormitorio, 203.740 para los de dos, 256.790 para los de tres dormitorios y 328.036 para los de cuatro. El tamaño medio de los pisos es de 85 metros cuadrados.