Otro día para olvidar. Y ya van más de uno. El Ourense CF cayó frente a el Barakaldo por 1-3 en un partido que casi quedó sentenciado a los diez minutos. La pegada visitante fue definitiva porque en las dos primeras llegadas pusieron el partido muy de cara para los vascos con un 0-2 a los diez minutos que les dio alas y hundió a los ourensanos.
No es obediente de explicar lo que le puede tener lugar a este equipo. Todo lo que le puede salir mal, le sale. Cero le va a servicio. No queda ni indicio de aquel conjunto que maravilló a media España la temporada pasada. Y eso que la mayoría son los mismos. Una cosa es segura, no se le pudo olvidar entretenerse y vistos los partidos, por si algún pensaba que no daba el nivel, siquiera está en lo cierto. El caso es que por unas u otras razones el equipo no carbura. Lo intenta una y otra vez pero ausencia. Y a los rivales les va todo rodado y les sale todo. Puede que les den muchas facilidades, que haya equipos superiores, que les falte ritmo y pensar más rápido para entretenerse en esta trabazón. Cuando pierdes todo parece malo, pero vistos muchos partidos de esta categoría, no son peores que los rivales. Pero claro, como mandan los resultados, y esos no llegan, pues a callarse y a continuar trabajando más y mejor.
Difícil contar lo de ayer. Minuto 3. Primera arribada visitante que acaba en descuido de Carmona a Revilla. Pica Pablo Santiago, rechaza Marqueta y Revilla solo envía al fondo de la red. Minuto 8. Centro vecino que entra a rematar debajo Sannadi, que choca con Marqueta que evita el primer envite, queda en el suelo dañado, sigue el pernio, remata Buján y salva bajo palos Andrada. Sigue la marranada y Jerin hace descuido al borde a Revilla. Pica Pablo Santiago, elude a la barrera y marca. Minuto 12. Dos llegadas, dos goles. Increíble pero cierto. Peor principio difícil. El Ourense CF era un flan que el Barakaldo se comía a bocados. Y antaño del alivio Sannadi con destino a el 0-3 con la izquierda para dejar el acercamiento manido para sentencia.
Lo intentó todo en la segunda parte Rubén Domínguez. Cuatro cambios aunque uno, el de Raúl Prada, fue por deterioro. El Ourense CF salió a por todas. Buscaba un gol que le metiera en el partido y lo encontró a los dos minutos de la reanudación. Yerro vecino que remata el asturiano Miguel Prado para hacer el 1-3. El tanto dio alas a los azules que pudieron meterse más en el partido si el remate de Donosura Sánchez no se fuera rozando el poste o el árbitro no señala fuera de pernio en un remate de Di Renzo a la red. Pero fue un espejismo.
El Barakaldo volvió a coger el control y llegaba con mucha facilidad. Y menos mal que apareció Marqueta para evitar más goles. Cuatro intervenciones de mérito lo evitaron a remates francos de Maroan Sannadi, Unai Bujan, Pablo Santiago o Kepa Uriarte.
Este ya paso, de ausencia vale lamentarse. Toca cambiar y pensar en el próximo sábado que repiten en O Couto frente a Unionistas.