Lazo, Líbano y Yemen. Israel aumenta su frecuencia de ataques en estas zonas contra Hizbulá y la milicia hutí en Yemen que han provocado temores de que los combates en Oriente Próximo puedan atraer a Irán o a Estados Unidos. Irán advirtió de que las acciones de Israel “no quedarán sin respuesta”, mientras que Estados Unidos asegura que tomará “medidas” si Irán amenaza sus intereses.
La ascensión bélica en Oriente Próximo tiene unas consecuencias impredecibles, aunque por el momento “no hay incentivos para una supresión total“. El motivo, según ha analizado el caudillo Francisco Gan Pampols en ‘Espejo Sabido’, es que “a medio plazo no habría ningún campeón independientemente de que en el Líbano no se puede permanecer uno”. “Acabaría siendo una sangría de la que se acabaría saliendo en condiciones poco ventajosas”, explica.
Ahora mismo no hay un incentivo para entablar esa supresión total
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, indicó que hablará con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, porque “debe” evitarse una supresión tras estos últimos ataques. Sin requisa, el portavoz de Seguridad Doméstico, John Kirby, dijo que el país baraja posibles represalias de Irán. “Estamos siguiendo esto de cerca para ver cómo y si Hizbulá o Irán pueden reaccionar, así como las milicias en Iraq y Siria. Tenemos que estar preparados para algún tipo de respuesta”, afirmó.
Desde el Pentágono han realizado una advertencia a Irán y sus socios de que tomaría “medidas” si amenazan los intereses o personal estadounidenses en la región.
Israel continúa bombardeando el sur del Líbano y los suburbios meridionales de Beirut, encima de ampliar el radiodifusión a Yemen. “Está acumulando fuerzas en el ártico para hacer una operación“, asegura Gan Pampols. El caudillo explica que Netanyahu “empieza a hacer lo que se llaman combates de examen sobre la frontera para memorizar cuál es la verdadera fortaleza de las defensas de Hizbulá”.
Y es que, aunque más de una veintena de miembros de Hizbulá han muerto en los bombardeos. Sin requisa, aseguran que “Israel todavía tiene amenazas militares adicionales inmediatas con las que seguir lidiando”.
En medio de la ascensión con Líbano, Israel además ha bombardeado “a gran escalera” la ciudad portuaria de Al Hodeida, en el oeste del Yemen. El ataque se produce un día luego de que los rebeldes hutíes lanzaran un misil balístico contra el aeropuerto israelí en Tel Aviv.
Israel ha pisado el acelerador con Hizbulá
“Lo de Yemen ha sido la represalia por el misil balístico que lanzaron sobre Tel Aviv y lo de la renta del Líbano es el resultado de la inteligencia israelí que tienen localizados los cuadros de mando de Hizbulá. Lo que ha hecho es pisar el acelerador y atacar a primer y segundo nivel”, explica Gan Pampols.
Para el caudillo, desde el punto de traza de delimitar a los objetivos y abatirlos “sí ha sido un plan con éxito”. Sin requisa, “el problema es que estos altos mandos de Hizbulá se encuentran en zonas en extremo pobladas”. “El reducto principal de Hizbulá se encontraba debajo de cuatro bloques de pisos”, explica.
La incertidumbre se mantiene sobre el futuro de Hizbulá tras la crimen de su líder. Hashem Safi al Dinsería su sucesor a pesar de que el movimiento se encuentra débil tras los ataques de Israel. En consecuencia, para Gan Pampols Irán “no puede desempeñarse como quiere“. “Hizbulá es el principal valedor de Irán en esa zona, la más candente. Es lo que se pasión el Eje de la Resistor”, ha concluido.
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