La «buena situación» de almacenamiento de agua en la que han cerrado este lunes, 30 de septiembre, el año hidrológico los 18 embalses que gestiona en Castilla y Valeroso la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha permitido que el organismo de cuenca autorice «riegos extraordinarios» y «esporádicos» en la primera quincena del mes de octubre, más allá de la campaña habitual, dando respuesta a las peticiones recibidas. Así lo ha regalado a conocer su presidenta, María Jesús Lafuente, quien, si aceptablemente condicionó que puedan seguir irrigando sus cultivos al bulto de saldo, dio por hecho que podrá apropiarse a extremidad posteriormente de una campaña que ha culminado sin mayores restricciones, posteriormente de las complicadas anteriores.
Y es que el aspecto que presentan los pantanos de la Confederación es mucho mejor que el que arrojaban hace un año. De media, están al 47,3 por ciento de su capacidad, con 1.349 hectómetros cúbicos de saldo almacenado una vez superado el verano, la época de viejo consumo y la que asiduamente registra menos aportaciones. Es, por otra parte, el «mejor número» desde 2018, destacan desde la Confederación y, por otra parte, supone rebasar en nueve puntos porcentuales la media del postrero decenio (38 por ciento).
Perspectivas optimistas
Y aunque todo dependerá de cómo avancen los meses, lo cierto es que estar 16 puntos porcentuales por encima de los niveles que tenían a estas jefatura de 2023 hace prever que la próxima campaña de riego se presente con «buenas perspectivas».
Las «abundantes» precipitaciones de otoño y invierno, unido a las tormentas descargadas incluso en primavera y verano han ayudado notablemente a este mejor aspecto en los embalses.
De hecho, la mayoría de los sistemas del Duero registran un acumulado por encima de la media del postrero decenio, e incluso en los palentinos Carrión y Pisuerga –que el año pasado bajaron casi hasta la deshidratación– la diferencia «es abismal», valora la presidenta de la CHD.
Hay casos en los que los vasos están más que medio llenos, destacando el Arlanza, al 62 por ciento; Suspensión Duero, Tormes y Águeda, incluso por encima del 50 por ciento. Aunque incluso hay excepciones, caso del embalse avilés de Las Cogotas, al 40 por ciento.