El Gobierno de Israel ha ostensible persona “non grata” al secretario caudillo de la ONU, António Guterres, y ha vetado su entrada en el país, bajo el argumento de que no condenó de forma “inequívoca” el ataque con misiles resuelto la víspera por Irán y que, luego, “no merece poner un pie en suelo israelí”.
El ministro de Exteriores, Israel Katz, ha descrito a Guterres como “un secretario caudillo anti israelí que brinda apoyo a terroristas, violadores y asesinos”, categorías todas ellas en las que engloba a Hamás, a Hezbolá, a los hutíes yemeníes y a Irán, responsable extremo “del terror mundial”. “Se le recordará como una mancha de la historia de la ONU”, ha zanjado en un comunicado.
El Gobierno israelí ya había criticado públicamente a Guterres en el pasado y, en esta ocasión, considera inadmisible el comunicado que el mayor responsable de Naciones Unidas emitió poco luego del inicio del ataque iraní sobre Israel. En él, el ex primer ministro portugués condenaba “la expansión del conflicto en Oriente Próximo”, con “una subida detrás de otra”.
“Esto tiene que detener. Necesitamos completamente un parada el fuego“, señaló, en una escueta nota en la que no incluía alusiones concretas a ningún de los actores directamente implicados.
El Empleo de Exteriores de Israel ha lamentado que “no mencionó a Irán” ni condenó de forma clara su “enfermo ataque”, por lo que considera que ahora no es bienvenido. “Israel seguirá defendiendo a sus ciudadanos y su dignidad doméstico con o sin António Guterres”, ha experto Katz.