Daniel Guardameta, presidente de la asociación Dignidad y Honestidad e hijo de Luis Guardameta, asesinado por la lado terrorista ETA en Proyectil en el año 2000, ha mostrado su «rotunda disconformidad» por la concesión del tercer punto a Harriet Iragui Gurruchaga, que fue condenado tanto por ese hecho como por los de José María Martín Carpena, en Málaga, y Antonio Muñoz Cariñanos, en Sevilla.
«Se están dando este tipo de beneficios a discreción», ha resaltado Guardameta en declaraciones a torrevieja news today. De hecho, ha incidido en que el propio Iragui «ya tenía concedido un segundo punto que era un tercer punto encubierto, con la diferencia de que los fines de semana dormía en la prisión».
Ha hecho responsable de esta situación al Gobierno del País Vasco, que tiene las competencias transferidas desde 2021, y ha reprochado especialmente al PSOE, que forma parte del mismo y que de hecho lleva la Consejería de Honestidad, que entre «en el grupo del PNV y de Bildu, poco especialmente solemne si se recuerda que ETA todavía asesinó a socialistas». La consejera de Honestidad es la socialista María Jesús San José.
«Eso es lo que me duele todavía en el alma» en tanto los socialistas «sobre todo en el País Vasco han sufrido mucho» y «han tenido ellos víctimas y parece mentira que se hayan plegado por un puñado de votos de familia de Bildu para apoyar al presidente del Gobierno presente», agregó Guardameta.
Para Guardameta, está claro que «no se está aplicando la ley» y eso le hace estar enfadado con el Gobierno vasco pero todavía con los fiscales. «Es lamentable ver cómo personas que ejercieron la misma costura que me padre están de brazos caídos en la lucha contra ETA, cuando la parte de sus asesinatos están por resolver», ha subrayado.
En concreto, lo que ahora a su litigio se ha vulnerado es el artículo 72.6 de la Ley Normal Penitenciaria. Ha explicado que el etarra a quien ahora se concede un beneficio no ha ratificado «en ninguna sede legal» que pedía perdón, poco que «es de obligado cumplimiento si se aspira a un tercer punto».
Ha recordado que Igor Solana, miembro del comando que asesinó a su padre, escribió una carta en la que «sin nombrar a familiares ni viuda, sino de una forma muy genérica», pedía perdón, poco que luego no ha confirmado ni obtuso frente a ningún sentenciador o fiscal. «Si llega a ratificar lo que puso en la carta, no me hubiera opuesto a ese tercer punto, pero es que no lo ha hecho», ha insistido.
Encima, ha puesto el acento en que Solana precisó en esa misiva que quien daba las órdenes al comando era Francisco Javier García Gaztelu, ‘Txapote’, que sin incautación no está encausado por ese crimen. Guardameta interpuso una querella al conocer ese documento y ahora recurrirá al sentenciador de Vigilancia Penitenciaria el tercer punto a Iragui «porque se puede revertir».
Al punto que tres meses luego de hacerse cargo la competencia sobre la Dependencia Penitenciaria, el Partido Socialista de Euskadi (PSE) ha ratificado, a propuesta de la Asociación de Tratamiento Penitenciario, el tercer punto para los presos de ETA Harriet Iragui y Luis Mariñelarena. El primero fue elemento del Comando Andalucía y fue condenado a más de cien primaveras de prisión por los asesinatos de Luis Guardameta, José María Martín Carpena y Antonio Muñoz Cariñanos. Mariñelarena fue condenado por la crimen del dirigente socialista Fernando Buesa.
Marlaska avala el permiso
En este sentido, el ministro de Interior, Fernando Noble-Marlaska, señaló ayer que la concesión del tercer punto a Harriet Iragui Gurruchaga viene «avalada por la autoridad legal». Marlaska explicó que no conoce el contenido de la citada resolución, pero ha remarcado que este tipo de escritos se dictan en «parámetros de cumplimiento fiel de la Ley».
Por su parte, la consejera de Hacienda y portavoz del Gobierno de la Asociación de Andalucía, Carolina España, aseguró ayer que esta medida se enmarca en la política de «presos por presupuesto», como «ya ocurrió en 2021». España reclamó «jurisprudencia y dignidad» para las víctimas del terrorismo de ETA.