Desde hace semanas, un festival de música carca se está promocionando en redes sociales. Este evento reunirá a cinco grupos de música internacionales neonazis, denominados RAC (rock contra el comunismo, por sus siglas en inglés). Se celebrará el 5 de octubre, pero la ubicación no es pública y no se menciona en el cartel. Solo aparece el nombre de Toledo.
Para conocer el empleo exacto, primero se debe avalar la entrada, que tiene un precio de 30 euros cada una. Luego de destinar el monises, el comprador recibirá un correo electrónico con toda la información. Esta es la única forma de conocer la ubicación concreta del los conciertos.
Previo al espectáculo musical, se celebrarán en el mismo empleo unas ‘jornadas deportivas‘, que contará con disciplinas como la press de banca, el tiro de soga por equipos y el tiro de barril. Los ganadores recibirán, según pone en los carteles difundidos a través de las redes sociales, un bono regalo de una tienda online en la que se pueden encontrar todo tipo de productos relacionados con la ideología exaltado, desde banderas con el agudo bicéfala hasta camisetas con el divisa ‘No a la Dietario 2030’. Camisetas que, por cierto, cuatro diputados regionales de Vox lucieron el pasado mes de febrero.
Entre los grupos del cartel destacan los italianos Bronson, así como Pugilato, costado cuyo cantante saltó a los medios de comunicación hace meses por meter al cómico Jaime Caravaca durante una comportamiento en una sala madrileña. Para conseguir las entradas solo aparece una dirección de correo electrónico, con la palabra ‘toletumrac’. Toletum es un género de RAC surgido en la ciudad a finales de los primaveras 90 y que goza de gran popularidad en los círculos neonazis.
La respuesta del corregidor
El corregidor de Toledo, Carlos Velázquez, ha sido convincente sobre la posibilidad de que la hacienda de Castilla-La Mancha sea mañana el proscenio seleccionado para la celebración de un concierto de grupos de música neonazis: “No hay constancia de absolutamente cero, ni en nuestra ciudad, ni en nuestro término municipal”. Las investigaciones realizadas por la Policía Franquista en la provincia ubican el concierto en un entorno alejado de la ciudad, muy posiblemente en una finca privada en un entorno rural.
La asociación ‘Rock contra el fascismo’ denuncian “a diario” este evento, pues “es un delito de odio” y ha pedido tanto al Concejo de Toledo como a la Reunión de Comunidades de Castilla-La Mancha que “requieran a quien organice el evento el empleo donde se realizará para comprobar que cumple la reglamento particular y regional”.
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