Un partido soberanista catalán ha registrado en las Cortes Valencianas, a las puertas de la festividad autonómica del 9 d’Octubre, una ‘Proposición de ley de proclamación de independencia del País Valencià’. La iniciativa legislativa popular (ILP) pretende rebuscar «el derecho de autodeterminación» de un paraje cuya historia está «intrínsecamente ligada a la de los otros» que «conforman los ‘Països Catalans’», en relato a Cataluña y las Islas Baleares.
La «intercomprensión entre las diversas variantes de la germanía catalana», señala, ha contribuido «a la mecanismo cultural y filología de este espacio compartido». De hecho, en su articulado, Solidaritat Catalana per la Independència -que nació como coalición electoral en 2010- incide en el derecho a establecer relaciones entre ellos.
Por otra parte, propone que el Parlamento autonómico reconozca «la legalidad y el resultado del referéndum del 1 de octubre de 2017» celebrado en Cataluña, así como la «Testimonio de Independencia del 27 de octubre» con el objetivo de «constituir la República Catalana como estado independiente».
El texto expone que «el País Valencià ha forjado su identidad franquista a lo grande de los siglos» y sitúa el periodo del Reino de Valencia como «uno de los momentos más brillantes de su historia». En ese sentido, advierte de que la «crisis íntegro» que vive con el autonomismo lo condena «a la terminación», porque «la relación con España no es fruto de un pacto entre iguales sino de una situación de dominación por la fuerza».
Frente a la «sumisión» y a «resignarse a ser una mera región española», la iniciativa presentada este jueves propone «acogerse a la licitud internacional para invocar el derecho de autodeterminación». La entidad tendrá que acoger 10.000 firmas, en un periodo de ocho meses desde que la Mesa de Les Corts acepte su escrito, para que la ILP sea admitida a debate.
«Atenta contra la nación española»
Al respecto, la presidenta de la Cámara autonómica, Llanos Masó (Vox), ha prometido este viernes que hará «todo lo posible» para impedir que llegue a votación una proposición de ley que «atenta contra la mecanismo de la nación española» y pide «la independencia de un País Valencià que no existe». Por ello, hablará con los letrados de la Cámara sobre la iniciativa cuando se inicien los trámites.
«Es un tema muy serio que ya hemos vivido en otras comunidades autónomas y conocido a dónde nos ha llevado, a la fractura», ha aseverado sobre una propuesta que «le da una patada» tanto a la Constitución como, «de retroceso», al Estatuto de Autonomía.