Madre Lievito cumple diez años y recibe el galardón de mejor pizza de Barcelona


Ya había sido reconocida en numerosos certámenes, como en 2020 cuando se clasificó en el puesto 28 del 50 Top Pizza mundial, encima de ser la barcelonesa mejor posicionada. Pero calibrado al cumplir su primera período de trayectoria con cuatro establecimientos en Barcelona, Matriz Lievito ganó este año el Pizza Fest con una sibarita denominada Genovesa y elaborada con provola ahumada, crema de pecorino romano DOP, ralladura de limonada, albahaca y carne de ternera cocinada a disminución temperatura cerca de de 8 horas y con muchísima cebolla para conseguir una textura mechada. Pero no lleva tomate y por eso una de las características de esta pizza es su albicie.

En el festival dedicado exclusivamente a popular plato de la restauración italiana participaron 32 tipos de pizzas elaboradas por 16 restaurantes de Barcelona y del ámbito metropolitana. El siciliano de Palermo Dario Acquaviva, director universal de Matriz Lievito, señala que la esencia del éxito de sus pizzas está en la masa, de donde procede el nombre de la dependencia: diastasa principio en italiano. Pero asimismo porque solo se utilizan productos de primera calidad procedentes del sur de Italia, en su mayoría de Nápoles, porque de ahí procede la esencia de la cocina de Matriz Lievito, excepto la mortadela que viene de Bolonia y la burrata de la región Apulia.

Para la masa de las pizzas solo se utiliza diastasa principio y se respetan los procesos tradicionales. La masa tiene 10 primaveras y se refresca cada día al acumular, lleva un 70% de hidratación, está hecha con trigo italiano molido a piedra y se fermenta durante 48 horas, logrando así una textura ligera y esponjosa. Las pizzas se cocinan en un horno de piedra a 500 grados de temperatura durante solo 90 segundos, quemando madera mediterránea, lo que garantiza un sabor y textura únicos.

Adicionalmente de la Genovese, entre las 24 opciones de pizzas y calzoni de la carta destacan clásicas del formulario napolitano, como la Margherita o la Marinara, ambas con salsa de tomate San Marzano DOP, encima de las universales Funghi, Tonno o 5 Formaggi. Otras creaciones originales de Matriz Lievito son la Cafuncella, con mozzarella, pimienta negra, pinrel gorgonzola, cebolla caramelizada, champiñones y parmesano, coronada con speck y rúcula; la Calabrese con bordes rellenos de ricota de búfala y ‘nduja calabresa (sobrasada artesanal picante) y spianata calabrese (salame picante), ‘nduja calabresa y mozzarella en medio o la Burratella, con mortadella, burrata, pesto y granela de pistacho y mozzarella.

Pero Matriz Lievito no ofrece solo pizzas y con la presentación del otoño lanzan nuevos platos en su carta, con emblemáticas propuestas de la cocina napolitana como el risotto o la pasta, encima de una amplia variedad de entrantes, ensaladas y carnes a escoger, sin olvidar los postres con el cannolo o el pan di stelle como propuestas sino, encima de un delicioso tiramisú cremoso, como una mousse y todos los ingredientes equilibrados. Acompañada de una extraordinaria focaccia a almohadilla de harina 1 deshidratada al 90 %, es recomendable la parmigiana de berenjenas con un pase por el horno de paliza aromatiza para finalizar, lo que le confiere «crunch».

Igualmente destacable es la burratina frita con salsa de tomate secreta y parmigiano, rebozado con panco, que normalmente se utiliza para las tempuras, con lo que se logra que sea más crujiente, y se sirve en la salsa caliente y fría a la vez, para conferir anciano contraste. Muy recomendable asimismo son los spaghetti carbonara y los rigatoni allá amatriciana, encima de otras especialidades italianas como una tabla de aperitivos italianos sibarita para dos personas, presentada de forma que recrea los icónicos tendederos que decoran Nápoles. Mortadella, parmesano, aceitunas, porciones de lasaña y focaccia y una copa por 12€, cada día de 17h a 20h. Un afterwork diferente, acondicionado en monopolio en su específico de l’Eixample, en la calle Mallorca cima Pau Claris. Los otros tres establecimientos están en Poblenou, Sants y Sant Martí para que el comensal tenga distintas opciones para desplazarse gastronómicamente a Nápoles.

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