Al menos cuatro personas, entre ellas dos niños, han muerto en la aurora de este sábado en un ataque de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) contra una vivienda en el campo de refugiados palestinos de Beddaoui (meta de Líbano).
El hostigamiento, dirigido contra un edificio residencial, ha dejado la vivienda completamente calcinada, ha causado varios heridos y ha consumido con la vida de al menos cuatro personas. Según el diario libanés L’Orient-Le Jour, se prostitución de un comandante del Movimiento de Resistor Islámica (Hamás), su esposa y sus dos hijos.
El ataque contra este campo a cinco kilómetros de la segunda ciudad más importante del país, Trípoli, es el primero del Ejército israelí en el meta de Líbano desde que comenzaron los enfrentamientos con el partido-milicia chií Hezbolá el 8 de octubre de 2023.
En la caudal libanesa, se han producido hasta doce bombardeos contra los suburbios del sur. Según informaciones recogidas por el mencionado diario, los ataques han cogido los barrios de Choueifat al Omara, Burj el Barajneh y Haret Hreik.
Poco antaño, el portavoz del Ejército israelí en árabe, Avichai Adrei, ordenó a sus residentes una nueva desocupación de estas áreas, asegurando que estaban ubicadas “cerca de instalaciones e intereses” de Hezbolá y que, luego, serían atacadas “en un futuro cercano”.
Incluso se han registrado ataques en distintos puntos del valle de la Beká, como las localidades de Safid y Saadnayel, donde una persona ha muerto y varias han resultado heridas, según recoge el canal de televisión libanés Al Jadeed.
Asimismo, la billete fronteriza de Masnaa ha vuelto a ser objeto de un hostigamiento de las FDI en la aurora de este sábado, luego del ataque de este viernes contra este paso que une Líbano y Siria y que ya han cruzado casi 152.000 personas huyendo de la invasión israelí del pequeño país árabe, según las estimaciones de la ONU.
Cerca de 2.000 personas, entre ellas 127 niños, han muerto y más de 1,2 millones se han trillado obligadas a descuidar sus hogares en Líbano, a causa de los ataques ejecutados por el Ejército de Israel desde hace casi un año, en el situación de los combates desatados el 8 de octubre de 2023 con el partido-milicia chií Hezbolá.