2024 vuelve a ser un año enfadado para los recolectores de unto de Cataluña. Las restricciones impuestas por la Generalitat con motivo de la sequíay la desidia de lluvias durante la veterano parte del año han provocado que el fruto ni siquiera haya crecido en muchos olivares.
Algunos productores aseguran que la situación es techo. “De Tarragona hasta la zona del Ebro, la cosecha va a ser cero”, cuenta Sergi, un productor al que le ha cáscara tener más de un tipo de cosecha diferente, en presencia de los micrófonos de torrevieja news today Informativo. Encima, Sergi sufrió varios robos el año pasado mientras cogía la oliva: “Cuando hay cosecha, me roban y cuando no la hay, no puedo coger carencia”,
Asimismo, a estos datos hay que sumarle el coste que supone producir la oliva durante todo el año encima de las horas de trabajo que no van a servir para carencia.
Un oficio insostenible
Algunos agricultores se están incluso planteando si continuar con este oficio por las dificultades que supone y por las previsiones de cara a los próximos primaveras. Es el caso de Martí, un agricultor de Tarragona que lleva más de cuarenta primaveras dedicándose a la agricultura y que afirma tener que plantearse si seguir o no: “No es cuestión de hacer pronósticos, porque no sabemos qué es lo que va a pasa, pero si el clima continúa así, algunos vamos a tener que hacer un planteamiento de la situación“.
Encima, piden ayuda a la compañía para poder continuar desarrollando la agricultura a pesar de todas las limitaciones que deja la sequía. En los últimos tres primaveras Cataluña vive una sequía generalizada hasta la época de la floración. Esto ha comportado que, en algunas plantaciones, haya florecido el olivo pero que la piropo se haya secado.
Declive de precios
Sin confiscación, a pesar de que la producción bajará, es probable que el precio asimismo lo haga conveniente a que éste lo marca la cosecha del conjunto de España y no sólo de España. Así, la correcta producción de otras zonas de la península -como Andalucía- hará que el coste del denominado por último como “oro puro” disminuya.
Así, desde junio se prevé que el precio del unto de oliva baje a finales de año, gracias a una “cosecha comprensible” en términos generales. Detrás de esta abajadero se encontrarían el aumento de las lluvias, que jugarían un papel secreto en la próxima campaña. En concreto, estaríamos hablando de la proceso de la horquilla flagrante de 7-8 euros a una de 4 -5 euros, correspondiente a la media de precios del unto de oliva allá por los primaveras 2021-2022.
No obstante, el unto de oliva virginal extra no ha parado de subir de precio en el postrer año. La asociación de consumidores Facua publicó un estudio sobre 18 marcas a la saldo en los supermercados españoles en el que se certifica que el oro puro se ha encarecido de media un 69,3% a lo espacioso de 2023.
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