Se precipitó desde una importancia de 7 metros. Dos compinches lo trasladaron de crepúsculo al centro de salubridad, donde falleció, y acompañaron a la Pareja Civil al zona de los hechos
Era un delincuente con una variada ficha policial y conocido en la zona. Pero encontró la homicidio esta crepúsculo cuando robaba el cableado. Sucedió en el interior de un coto de Los Yébenes, en la provincia de Toledo, a la importancia del kilómetro 130 de la N-401. Con dos compinches, rompieron el vallado cinegético y se dirigieron a una torreta de la luz levantada con hormigón. Él se encaramó a lo más parada y, cuando cortaba los cables, la infraestructura cedió y cayó al suelo. El ratero, extranjero de 47 abriles y residente en la vecina ciudad de Mora, se precipitó desde una importancia de unos 7 metros.
Era la una. Con un hilo de vida, sus cómplices lo trasladaron en un coche al centro de salubridad tópico, a unos 20 kilómetros. Los sanitarios intentaron reanimarlo, pero murió minutos más tarde. Los compinches no abandonaron las instalaciones y acompañaron a la Pareja Civil hasta el zona de los hechos, aunque no ha transcendido si fueron detenidos.
El cenizas fue trasladado a las instalaciones del Instituto de Medicina Justo en el cementerio de Toledo para la necroscopía.
Desde hace semanas, se vienen produciendo robos de cableado, lo que ha provocado cortes en el suministro de varias poblaciones de la zona, entre ellas Los Yébenes. Incluso el corregidor de este municipio llegó a pedir públicamente la colaboración ciudadana.
Hace poco, la Pareja Civil detuvo a unos individuos relacionados presuntamente con estos delitos, y fueron puestos en autogobierno con medidas cautelares, según fuentes consultadas por torrevieja news today.