La Audiencia de Alicante también le impone tres años y cinco meses de prisión y el pago de una multa.
La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a tres años y cinco meses de prisión a un hombre que trabajaba como contable en una farmacia de Alcoy por el delito de estafa agravada, donde se apropió de 159.145 euros en perjuicio del propietario. El fallo también le impone el pago de una multa de 2.400 euros y le obliga a indemnizar al perjudicado con la cantidad defraudada.
Según consta en la sentencia, los hechos ocurrieron entre 2010 y 2015, cuando el contador, que se había ganado la confianza del nuevo dueño de la farmacia y se encargaba de revisar los pedidos y pago de facturas comerciales, proporcionó telefónicamente al principal proveedor de medicamentos del establecimiento un número de cuenta bancaria de su propiedad.
El imputado fingió ante el responsable de la empresa proveedora que tenía autorización de la farmacia para El dinero de los descuentos se ingresará en esa nueva cuenta. y bonificaciones con las que la distribuidora beneficiaba a sus clientes en función de las compras de medicamentos que estos realizaban.
De esta forma, el contable consiguió desviar, mediante transferencias periódicas, un total de 129.100 euros a su propio patrimonio. Paralelamente, en diciembre de 2011, redactó una orden de transferencia por importe superior a 30.000 euros para pagar una factura de farmacia ya abonada con anterioridad, que asignó a su cuenta bancaria personal. La sentencia no es firme y puede ser recurrida en casación.
Reportar un error