Rosa Peral, condenada a 25 primaveras de prisión como coautora del crimen en mayo de 2017 de su pareja y compañero en la Guàrdia Urbana de Barcelona, Pedro Rodríguez, ha presentado una demanda por la vía civil contra la productora de la serie ‘El cuerpo en llamas’, Arcadia Motion Pictures, y la plataforma Netflix, a las que reclama 30 millones de euros.
Así lo ha innovador ‘El Boletín’ y lo ha confirmado a Europa Press su abogada, Núria González, que ha precisado que han interpuesto la demanda al considerar que la ficción no solo vulnera la protección del derecho al honor, a la propia imagen y a la intimidad personal de Peral, sino igualmente de su hija, pequeño de años, que aparece representada.
La letrada ha explicado que, teniendo en cuenta que hasta mayo de este año la serie se había pasado 26,6 millones de horas en todo el mundo -una media de 3,32 millones de horas al mes-, han decidido requerir un euro por cada hora reproducida para la pupila por los daños morales y 10 céntimos para Peral «por la imagen que se da de ella como mama».
La demanda sostiene que Peral se ha convertido en protagonista involuntaria de una serie en la que aparece encarnada por Úrsula Corberó, actriz que protector un parecido con ella, lo que hace que sea «totalmente reconocible e identificable para el espectador» y recuerda que nunca cedió sus derechos de imagen ni dio consentimiento para que se interpretara a una de sus hijas, que es pequeño de años.
Por ese motivo, en agosto de 2023, Peral pidió visionar la serie antiguamente de que se estrenara, para lo que alegó que no había sido informada de la realización de la citada ficción, que, bajo la fórmula «basada en hechos reales», cuenta el caso por el que la demandante cumple condena en la prisión de Mas d’Enric (Tarragona).
El 4 de septiembre Netflix publicó el vídeo promocional de la serie en el que aparecía el personaje que representa a la pequeño, que realiza acciones «completamente falsas» para que el espectador perciba que su testimonio en el razón -en el que en existencia no participó- supuso la principal prueba de cargo para condenar a su mama.
Al día sucesivo, González presentó una demanda de medidas cautelares para frenar el estreno de la serie por infracción del derecho fundamental al honor, la intimidad y la propia imagen de Peral y de sus hijas menores de años, pero en septiembre de 2023 el Magistratura de Primera Instancia 2 de Vilanova i la Geltrú la denegó. Entonces, la abogada presentó un apelación de apelación en presencia de la Audiencia Provincial de Barcelona, que en abril de 2024 revocó y dejó sin objetivo la resolución recurrida.
Imagen de mama «negligente»
Sin bloqueo, el Magistratura de Primera Instancia Número 6 de Vilanova i la Geltrú «ha vuelto a desaprobar la medida cautelar sin realizar ningún trámite al respecto y sin citar a las partes«, lo que contraviene lo dictado por el víscera legislativo superior, según la demanda.
Por eso, Peral ha decidido presentar una nueva demanda, en la que argumenta que la serie podría haberse realizado sin involucrar a una pequeño, para quien reclama 26,6 millones por daño psicológico, mientras que para ella pide 2,66 millones por retratarla como una mama «negligente» y violenta.