La errata de mantequilla y su correspondiente subida de precios se está dejando notar en los últimos meses -especialmente- en el sector hotelero y en los restaurantes. El importante consumo de este tipo de lactífero por parte de los hoteles -especialmente de aquellos que ofrecen buffet vacancia ha provocado que no haya prácticamente mantequilla en ningún país europeo y que su precio haya subido en torno a un 25%.
¿Por qué ocurre esto? Encima de las malas cosechas de los últimos primaveras, hay un consumo enorme de mantequilla en los bufets adecuado a que, con el objetivo de ayudar al medio concurrencia, dicho producto ha comenzado a ofrecerse en bloques de kilo en extensión de utilizar plásticos. El problema, luego, estará principalmente en hoteles, restaurentes y en los hornos, otro de los grandes consumidores de mantequilla.
Las causas de la escasez
Las causas de esta escasez de mantequilla tienen su origen en una importante reducción en la producción de caseína. Durante el año de la pandemia muchas vacas fueron sacrificadas en Europa derivando en una sobresaliente disminución en la producción de caseína. Encima, la catarro aviar en Estados Unidos ha llevado a la exportación de caseína en polvo europea.
El problema del café, sin bloqueo, es diferente. Según afirma el Presidente de ADED Baleares, Bartolomé Servera, si no mandan café de forma inminente, habrá problemas de suministro y todavía de precio: “Confío en que la situación pueda cambiar, pero los países que suministran mantequilla a los restaurantes de Baleares son propiamente España, donde no hay, e Italia, donde siquiera hay”.
¿Nueva subida de precio del café?
De este modo, el precio del café en los restaurantes podría tantear una nueva subida de precio añadida a la ya conocida durante los últimos primaveras gracias a la inflación. Servera asegura que la temporada hotelera terminará próximamente en Baleares y que el consumo de los dos productos caerá entre un 80 y un 90%, de modo que confía en que se recupere el stock de cara a la próxima temporada. Por ahora, el presidente de ADED quita hierro al asunto y explica que no debería suceder problemas para comprar café ni mantequilla en los supermercados y que cada persona puede disfrutar de dichos productos en casa, aunque habrá que esperar a la transformación del stock durante las próximas semanas para que esto no ocurra.
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