El 18 de diciembre de 2022, una mujer fue a las inmediaciones del túnel sito bajo las vías de ferrocarril, donde fue a dejar unas bolsas con ropa y unas monedas para los más necesitados. Al verla en el espacio, según indicó, un hombre la abordó. “Me preguntó si tenía novio y le dije que tenía marido”, contó este miércoles la víctima en el Penal 1 de Ourense entre lágrimas.
Según su comunicación, el acentuado “me besó la mejilla y me tocó una teta”. En ese momento, la víctima tuvo que detener su afirmación unos segundos y coger corriente, ya que el lloriqueo le impedía seguir hablando. Tras ello, contó que el acentuado, luego de agredirla sexualmente, le siguió hablando, por lo que le dio todas las monedas que llevaba encima y escapó del espacio. Meses luego, identificó al encausado en una rueda de gratitud.
Asimismo, indicó que, con posterioridad a los hechos, vio al encausado “en el psiquiátrico, cuando fui a examinar a mi mamá, me saludó y yo no le respondí”.
La jueza no pudo escuchar la lectura del acentuado, ya que este, pese a estar debidamente citado, no compareció en el prudencia, por lo que no pudo dar su lectura de lo que ocurrió aquel día. Sin bloqueo, la sagacidad se pudo celebrar igualmente al pedir la Fiscalía para él menos de dos abriles de prisión.
En este sentido, el Servicio Notorio indica que los hechos son constitutivos de un delito de atentado sexual, por lo que solicita para él una condena de 15 meses de prisión e inhabilitación singular para el derecho de sufragio pasivo durante el mismo tiempo. Encima, pide que se le prohíba aproximarse a la víctima a menos de 200 metros, a su domicilio y espacio de trabajo así como de contactar con ella por cualquier medio durante tres abriles.
Asimismo, solicita la pena de inhabilitación singular para cualquier profesión que conlleve contacto regular con personas menores de años durante dos abriles. Ahora será la jueza quien deberá atreverse si condena o no al acentuado.