El prudencia por la asesinato de 74 personas en la residencia DomusVi de Alcoy está manido para sentencia. Durante la pandemia, en tan pronto como mes y medio, fallecieron el 52,9% de los mayores internos. Los familiares lo tienen claro. “Tenemos la convicción de que la dirección del centro no atendió con la rigurosidad necesaria las recomendaciones que desde diferentes instancias científicas se apuntaban en presencia de la situación de pandemia que íbamos a sufrir. No se siguieron de modo diligente las pautas de sectorización. Solo así se puede explicar la virulencia del mismo. No había suficiente bienes humanos y materiales para hacerle frente”, lamenta José Luis García, presidente de la asociación de familiares de residentes de DomusVi Alcoy y Cocentaina.
Los letrados de la delación han insistido durante la sesión del prudencia que no se respetaron los protocolos para evitar la propagación del virus en el centro. No se separaron a los internos que tenían síntomas, todos comían en la misma sala. Por su parte, los abogados de la residencia aseguran que no actuaron de modo negligente y que el personal que había en el centro era el adecuado.
Las familias piden 2,3 millones de euros
Las familias reclaman en este prudencia civil 2,3 millones de euros de responsabilidad civil a la empresa matriz de DomusVi. La aseguradora Mapfre, que igualmente está demandada, considera que la emblema es “escandalosa y ataque”. Por otra parte, aseguran que se siguieron todos los protocolos y las recomendaciones sanitarias. Pero los familiares no están de acuerdo.
“Llevaban tiempo anteponiendo el acopio de beneficio financiero a la atención y cuidado de los usuarios y para cuando quisieron implementar las medidas pertinentes habían llegado tarde y no hubo modo de detener. El reguero de muertes reafirma esa convicción”, asegura el presidente de la asociación de los familiares.
Durante el prudencia los acusados han justificado esa inscripción tasa de mortalidad por la permanencia descubierta de los internos y sus enfermedades. Pero los familiares no están de acuerdo. “Poco falló para que 74 personas fallecieron en un mes y medio. Ayer de la pandemia nuestros mayores ya tenían esas mismas características y precisamente los llevamos a la residencia porque llevábamos mucho tiempo atendiéndolas en nuestras casas y cuando ya no tienes más medios para cubrir sus evacuación es cuando vamos a este centro. Lo que nos han dicho los peritos de la otra parte, pues evidentemente claro que son vulnerables, claro que tienen permanencia muy descubierta. Pero ellos quieren conservarse a la conclusión de que se pusieron de acuerdo 74 personas para perecer es un mes y medio”.
Los familiares han ratificado su petición de 2,3 millones de euros por mala praxis, mientras que la defensa ha pedido la absolución.
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