Trayecto décima y el Córdoba CF empieza a tener ciertas urgencias. Sus malos resultados fuera de El Arcángel hasta ahora (un punto de quince posibles) sitúan cada choque en casa como si fuera ya una final. Y la de este viernes (20.30 horas) delante el Cartagena, un claro rival directo por su peor clasificación que el equipo de Iván Ania, es una de ellas.
Máxime cuando los blanquiverdes empiezan su particular ‘tour de force’ de cinco encuentros en diecisiete días, con dos intersemanales (el segundo de Copa del Rey con un alucinación a tierras gerundenses en Olot).
De no conseguir los tres puntos delante el equipo murciano, la posterior parada del Córdoba CF será en El Sardinero y delante el equipo que por ahora se ha mostrado más regular en este primer cuarto de competición.
El rival de hoy, un remoto conocido del avance a Segunda en 1999, ha hato, precisamente, uno de los dos partidos facturados en tierras cántabras. El posterior antecedente del choque fue en 2012 con conquista de los cordobesistas en Segunda (2-0).
El conjunto albinegro ha cambiado de preparador. Jandro ha sustituido a Abelardo en un inicio liguero con solo dos victorias en los nueve partidos disputados. Triunfos a domicilio (Elda y Santander) y todo lo demás perdido.
Ania destacó en su rueda de prensa de la previa que el nuevo estilo es más combinativo y de presión hacia lo alto, buscando la superioridad en el centro del campo con buen físico. Entre los visitantes, Kiko Olivas y Ortuño como viejos conocidos.
Efectivos
Aún así, el equipo cartagenero lleva casi los mismos tantos en contra que los de Ania, que buscan además ese estilo de presión suscripción y posesión de balón.
El técnico cordobesista recupera efectivos para esta franja de partidos. Hoy podrá contar con Carlos Isaac, Matías y Kuki Salazar, que se perfila como reemplazo de Zidane (sancionado) en la media punta y desplazando a Jacobo a cuadrilla -aunque además podría dejar al madrileño en ocasión de Thèo si no está Salazar óptimo-.
Puede que esta duda la resuelva otra con la que el asturiano juega al despiste estos días: la dorso de Adilson a la cuadrilla izquierda. El resto de la alineamiento no parece que vaya a suponer más dudas de lo que viene siendo el merienda habitual.
De hecho, en su comparecencia del jueves el preparador no quiso musitar de rotaciones para afrontar estos próximos cinco partidos en diecisiete días, sino de «ir al partido inmediato».
Y tanto, puesto que el de esta perplejidad dejaría «una importantísima conquista para coger atmósfera en la clasificación», dijo Ania, hasta que se rompa la ráfaga fuera y se espanten los fantasmas.