Frente a las críticas al sistema de dependencia, la Grupo replica que, tras 18 abriles «sin funcionar», el Gobierno de Juanma Atezado ha activado un paquete de cambios para su restablecimiento. Se aprobaron en febrero, pero la consejera de Inclusión Social, Inexperiencia, Familias e Igualdad, Loles López, pedía este mismo mes tiempo para que cuaje. Defendió que, una vez que se produzca la «total implantación de los cambios», se verán los resultados. «Se agilizarán los plazos», sentenciaba.
Una variación de mucha relevancia es que se cambia el maniquí de dos visitas para obtener la condición de beneficiario de la dependencia. En el sistema que examen alejar la Grupo, eran necesarias dos resoluciones: una en la que se fijaba si el solicitante tenía derecho a entrar en el sistema y la segunda en la que se determinaba qué prestaciones recibiría -se plasman en el plan individual de atención (PIA)-. Con el mecanismo resuelto ahora, habrá una única encuentro al domicilio, en la que se establecerá todo.
En agosto, adicionalmente, se conoció que la Grupo tenía un esquema de orden para producir un nuevo maniquí de colaboración con los ayuntamientos para extender la encuentro única con un consumición anual de 14 millones en la región.
Uso de ‘tablets’
No es la única aparejo con la que la Grupo, como indicó ayer el delegado del Gobierno regional en Córdoba, Adolfo Molina, quiere meter «la sexta marcha» en la dependencia. Está pasando de usar en este sistema cinco programas informáticos a sólo uno para despersonalizar toda la información y actuaciones. Molina explicó que dichos programas «no estaban conectados». «Había que repetir procesos. No había trazabilidad y se multiplicaba el trabajo», expuso.
Este cambio informático, advirtió la Grupo este mes, «ha hecho que afloren expedientes en aplazamiento de hace muchos abriles». En concreto, con la primera migración de datos aparecieron en Andalucía 1.851 casos de personas que llevaban más de mil días esperando y que «ya han sido atendidos».
El nuevo sistema, defiende la Consejería de Inclusión, «examen descargar a los profesionales de tareas administrativas, como agendar las citas, y les dota de medios tecnológicos como ‘tablets’ para evitar que tengan que ir con documentación tan sensible de una cita a otra». El objetivo, señalaba ayer la delegada de esta Consejería en Córdoba, Dolores Sánchez, es suceder de «1,8 valoraciones al día a 3». CC.OO. de Córdoba aseguró esta semana que el nuevo software de valoración «está ralentizando el trabajo y se ha estrecho la ratio «a menos de un mensaje al día».
El delegado del Gobierno pidió a los trabajadores del sistema que «todos arrimemos el hombro». «Los profesionales están recibiendo formación sobre el nuevo procedimiento. Hasta que se ponga en marcha este maniquí, existen disfunciones», finalizó Molina.