El ‘president’ dice que “los gritos en la calle no afectarán a las negociaciones” para la investidura de Pedro Sánchez
La manifestación que tendrá lugar en Barcelona el próximo domingo contra las exigencias del independentismo por inversión de pedro sánchez no alterar el curso de las negociaciones con el PSOE. Así lo ha afirmado esta mañana el presidente de la Generalitat, Pere Aragónlo que ha minimizado el efecto que tuvo la protesta convocada por Sociedad Civil Catalana porque supone que “el amnistía es un hecho”.
El jefe del Gobierno ha añadido que las conversaciones Izquierda Republicana y Juntos con los socialistas y Agregar ““Dependen de los votos que se tienen en las Cortes y no de lo que se grita en la calle”. “Menos aún cuando el mensaje es contrario a encontrar soluciones para poner fin a la represión y seguir los caminos de negociacióndiálogo y acuerdo para que los ciudadanos de Cataluña puedan decidir libremente su futuro”, ha continuado.
Feijó, Abascal, Ayuso, Moreno…
En una comparecencia tras recibir en el Palau de la Generalitat al ministro presidente de Baden-Württemberg (Alemania), Winfried KretschmannAragón también ha tenido palabras para el desembarco de dirigentes políticos nacionales o de otras comunidades autónomas previsto para el 😯 acto contra la amnistía y la autodeterminación. Así, en referencia a la asistencia del líder de la PÁGINAS, Alberto Nez Feijoy el de voz, Santiago Abascalo los presidentes regionales Isabel Díaz Ayuso (Madrid) y juanma moreno (Andalucía), ha rebajado la carga simbólica de su presencia al señalar que “vendrán a Barcelona, se manifestarán y se volverán a ir”, en contraposición a quienes seguirán “trabajando cada día por el futuro”. y el bienestar de Cataluña”. Y añadió: “Cuando os vayáis, os pedimos que os llevéis a casa las críticas, el odio y el rencor”.
Por otro lado, Aragonès ha manifestado su “respeto” por el nombramiento del primer secretario de la PSC y jefe de la oposición en el Parlamento, Salvador Illacomo interlocutor con los partidos independentistas, un factor que fue criticado ayer por Junts por parte de Carlos Puigdemont y el secretario general, Jordi Turull, a quien “no le genera confianza”. Él presidente Quería dejar claro que, en una negociación, no se debe cuestionar a los interlocutores de las otras partes, independientemente de “la opinión que uno pueda tener sobre sus posiciones políticas”.