La dimisión este jueves del hasta entonces portavoz de Sumar, Íñigo Errejón, en medio de acusaciones de acoso y violencia machista y la denuncia posterior de la actriz Elisa Mouliaá por ataque sexual contra el ya exdiputado han supuesto un terremoto en la política doméstico. Sin bloqueo, el caso y la polémica desatada han traspasado las fronteras españoles.
El folleto inglés ‘The Times’ se ha hecho eco de la comunicado en un artículo donde detalla el ya conocido como ‘escándalo Errejón’ e interpreta lo sucedido como «un duro salida» contra el Gobierno castellano.
«Las acusaciones contra Errejón, que se perfilaba como el próximo líder de Sumar, han asestado un duro salida a las credenciales feministas del Gobierno de Pedro Sánchez, presidente socialista. Asimismo han provocado acusaciones de que la izquierda radical española ignoró las denuncias de acoso sexual presentadas contra Errejón hace abriles», afirma el diario.
La responsable del estallido de este escándalo ha sido la periodista Cristina Fallarás con la publicación este martes en su perfil de Instagram del testificación ignorado de una mujer que narraba episodios de comportamientos machistas por parte de «un político que vive en Madrid» y a quien además se refiere como el indignado social que «nunca talego la cabecera los días del 8M». «Es un maltratador psicológico, un real psicópata, un monstruo», se puede repasar en el mensaje.
El jueves, poco posteriormente de la dimisión del exportavoz de Sumar, la actriz y presentadora Elisa Mouliaá afirmó en una publicación en X (antaño Twitter) que ella había sido víctima de una ataque por parte de Errejón y que se disponía interponer una denuncia, filtrada al día posterior.
Con posterioridad, tanto Mouliaá como Fallarás han compartido testimonios de otras mujeres que vivieron situaciones similares con Errejón. Por su parte, la periodista que destapó el caso ha asegurado tener declaraciones de víctimas de otros políticos «tanto de izquierdas como de derechas».
La salida de Errejón del partido y de la política ha provocado una revolución en Sumar y Más Madrid, que niegan ocurrir tenido constancia de estos comportamientos y lamentan no ocurrir hecho «suficiente» para detectarlos. A raíz de estas informaciones, el partido de Mónica García cesó de sus cargos en la formación a la antigua jefa de recibidor del cofundador de Podemos, Loreto Arenillas, que presentó su dimisión como diputada en la Asamblea regional.