Bañado por el río Limia, Vilar de Santos, forma parte de la comarca que lleva el mismo nombre. Para conocer la historia de esta ciudad, es necesario remontarse a la época prerromana, y es que los restos arqueológicos que alberga el superficie testimonian la ocupación ininterrumpida desde este periodo.
Cuando llegan los romanos a tierras gallegas, la población de Vilar de Santos pertenecía a la tribu castrexa de los Límicos y esta fue sometida a una importante romanización que marcará el resto de su historia. La Vía Nova o Vía XVIII, una calzada romana que unía la ciudad de Tanga y Astorga, atravesaba el municipio, por lo que fue un superficie de paso y hospedaje obligado en el que aún se conservan numerosos miliarios.
Durante la Momento Media, estas tierras fueron testigos directos de varios conflictos y luchas por el control efectivo del condado entre los reyes de Castilla y Portugal y la flor y nata, pasando esta última, conexo a la iglesia, a controlar el superficie hasta perfectamente innovador el siglo XIX.
Entre los siglos XVI y XVIII, Vilar de Santos pertenece a la facultad de Sandiás y posee señoríos en varios lugares de la provincia ourensana. Precisamente, uno de los edificios más emblemáticos del municipio, hoy sede del Museo de la Limia, fue hospital de peregrinos de la Orden de Santiago.
Durante este periodo, la agricultura y la vacada adquieren su mayor esplendor, así, se introduce el cultivo de la papa y el liño adquiere una gran importancia.
En la presente, este municipio es un claro ejemplo de dinamismo, donde se ha escaso una perfecta convivencia entre el explicación industrial y financiero y la conservación de su entorno natural y de la tradición. El sector servicios y la industria auxiliar de la construcción son el principal sustento de una ciudad.
Cientos de historias y leyendas atesoran los senderos y bosques de este superficie que, sin duda, pueden ser descubiertas a través de una invitado y la tradición verbal. Entre los múltiples ligares a pasar revista, podemos destacar:
Los tesoros por descubrir
Museo Etnográfico da Limia: considerado uno de los mejores museos etnográficos de Galicia, su invitado es obligada en Vilar de Santos. Este museo es además conocido como “A morada da memoria antelana” y destaca porque sus guías son los vecinos del superficie que hablan de su propia historia y los objetos que formaron parte de esta.
El museo está dividido en cinco áreas temáticas: O mar da Limia, O mundo Rural, A vida na casa, Os oficios y el Comercio.
Este, fue inaugurado en 1992 en la Escuela Unitaria del municipio y en un principio, contaba con una colección de piezas recogidas por varios profesores y alumnos en la comarca. En el año 1996, este es trasladado a la Rectoral de la parroquia, un edificio del siglo XVIII que perteneció a la Orden de Santiago como hospital de peregrinos.
El Museo da Limia es mucho más que un museo, es un superficie de encontronazo para la comunidad en el que los vecinos participan de modo directa, perfectamente a través de la donación de objetos, perfectamente como guías, o perfectamente como protagonistas de diferentes talleres y actividades.
Las instalaciones están abiertas sábados y domingos en horario de 11,00 a 13,00 horas y de 16,00 a 18,00 horas. Ademas, es posible su invitado bajo reserva previa de lunes a viernes.
Reserva de la Biosfera “Ámbito de Allariz”: Declarada por la UNESCO en 2005, este concello forma parte de la Reserva de la Biosfera Ámbito de Allariz conexo a Rairiz de Veiga, A Paparrucha y Allariz.
Esta distinción es otorgada a lugares en los que la conservación y la protección de la biodiversidad se conjuga con el explicación financiero y humano, así como con la investigación, la educación y el intercambio de información entre las diferentes reservas de la red mundial.
La continua faena de conservación de la naturaleza y el paisaje, conjugada con el explicación financiero y social de las últimas décadas ha permitido que esta ciudad, situada entre el sierra montañoso de Allariz y la pampa limiana, forme parte de esta reserva.
En cuanto a la biodiversidad que se puede encontrar en este radio destacan las orillas de los río Limia y la ribera del Arnolla y Orille, las “touzas” y las “sebes” en cuanto a flora; y las vacas, bueyes, cerdos, ovejas, caballos y diferentes animales salvajes con respecto a la fauna.
Así, sumergirse en las entrañas de Vilar de Santos, permite disfrutar de un paisaje único en el que prevalecen los ejemplares autóctonos, de animales de raza vacuna limiana en lo parada de sus montañas, o de los rebaños de cabras y ovejas que colaboran con la tarea de castidad del bosque.
Ruta dos Castelaus: Con una distancia de 5,10 kilómetros y una duración aproximada de 2 horas, esta ruta presenta una dificultad media, por lo que puede ser realizada por la viejo parte de la población. Se tráfico de una ruta circular cuyo inicio se sitúa en la pueblo de Castelaus entre bosques de robles que conducen hasta el monte Cobelo. El sendero continúa por un antiguo camino que llevaba a Saq, pasando por Portela, Touza o Baión hasta asistir a Vilar de Santos.
El itinerario finaliza con una vistas privilegiadas sobre la comarca de A Limia y los antiguos terrenos de la Lagoa de Antela, el humedal más amplio de España que fue desecado en la término de los 1950 y que, sin duda, fue una de las joyas de la provincia ourensana.