Arnaldo Otegi expresa su “más absoluto y rotundo rechazo” a su nombre y al de EH Bildu y considera los ataques una “provocación a la convivencia democrática en nuestro país”
El ataque a la tumba, destruyéndola con pintura y excrementos, se produce apenas un día después del sabotaje que sufrió el monolito del campus de lava que conmemora el asesinato de Buesa y su guardaespaldas Jorge Déz en febrero de 2000, lo que ha vuelto a poner de manifiesto los riesgos éticos Diferencias entre los partidos vascos y EH Bildu. Todos los partidos en Vitoria pretendían aprobar una declaración institucional que EH Bildu ha abortado al negarse a firmar un texto de condena que, además, incluía “solidaridad” con las familias y reafirmaba el reconocimiento de las víctimas con su presencia en el espacio público.
Tras hacerse público el segundo ataque consecutivo, el coordinador general de EH Bildu Arnaldo Otegi ha utilizado las redes sociales para hacer público su “más absoluto y rotundo rechazo por mi parte y la de EH Bildu”. Otegi ha calificado estos sucesivos sabotajes como “auténticas provocaciones a la convivencia democrática” y ha subrayado que su naturaleza y origen son “desconocidos”. La reacción de Otegi se produce cuando EH Bildu ya está negociando con el PSOE su apoyo a una investidura de Pedro Sánchez y horas antes de que el líder de EH Bildu participe mañana sábado en un acto político organizado dentro de la larga precampaña de las elecciones autonómicas vascas. .
El rechazo de EH Bildu a este ataque perpetrado por desconocidos se ha producido mientras que en el Parlamento Vasco, el Lehendakari Urkullu calificaba de “execrable” este ataque al monolito.
Desconocidos han atacado con pintura negra el monolito situado en el campus universitario de lava que conmemora el lugar donde fueron asesinados Fernando Buesa y el ertzaina Jorge Dez Elorza en febrero de 2000. La Fundación Buesa ha denunciado este sabotaje que ha “condenado sin matices a deslegitimar terrorismo.” “El discurso del odio sigue presente en nuestra sociedad”, advirtió esta fundación impulsada por las familias de los dos asesinados en Vitoria.
El 22 de febrero de 2000, los miembros de ETA Asier Carrera y Luis Marielarena, cumpliendo órdenes de Xabier García Gaztelu, alias txapote, colocaron 20 kilos de explosivos en una furgoneta que aparcaron en el campus universitario de Vitoria. El ex vicelehendakari y líder del PSE-EE de Lava Fernando Buesa caminaba hacia la sede de su partido en la calle Arca con la escolta del ertzaina Jorge Déz cuando el vehículo explotó al activarse la bomba desde la biblioteca universitaria donde se encontraban los miembros del estaban ubicados. dominio. Fernando Buesa y Jorge Dez murieron instantáneamente.
El sabotaje al monolito de Buesa ha provocado una ola de reacciones de condena por parte de responsables institucionales y políticos vascos. La alcaldesa de Vitoria Maider Etxebarria (PSE-EE) se ha comprometido a “mantener viva la memoria de las víctimas y el derecho a la verdad, la dignidad y la justicia” tras conocer este sabotaje. Etxebarria había anunciado horas antes que Vitoria dedicaría unos jardines en el barrio de Txagorritxu al concejal del PP Miguel Ángel Blanco.
Una petición que la portavoz del PP de Vitoria, Ainhoa Domaica, había hecho el pasado mes de junio y que hasta hoy no ha recibido respuesta. “Es una decisión que debería haber llegado mucho antes, pero, por fin, 26 años después, Vitoria va a transmitir la memoria de Miguel Ángel Blanco con un espacio en su nombre como habíamos exigido al Partido Popular”, ha afirmado hoy Domaica. . durante la celebración del pleno sobre el Estado de la Ciudad en el que Etxebarria hizo su anuncio.
Domaica también ha mostrado su “más enérgica condena a este ataque” al igual que otros representantes institucionales del PP vasco como el portavoz en Durango Carlos García que ha lamentado el ataque cometido por “fanáticos”.