Los gemelos Vázquez Alarcón se sientan hoy en el banquillo de los acusados junto al novio de uno de ellos, Isaac Gil, por haber matado a la pareja sentimental de la otra hermana, Pedro Fernández. Dolores, Pilar e Isaac están acusados de asesinato con malicia y crueldad y se enfrentan a una pena de 24 años de prisión. En el caso de Dolores, la fiscalía solicita seis meses más de prisión al aplicarle la agravante de parentesco ya que era novia del fallecido. El crimen se cometió la madrugada del 10 de julio de 2021 en un edificio de Sabadell. Hay multitud de pruebas que rodean a los gemelos e indican que el asesinato fue planeado. Dolores invitó a Pedro a pasar la noche en su casa. Su relación sentimental no iba bien y aunque Pedro no lo vio claro y quiso romper, acabó aceptando. Mientras el hombre dormía relajado en ropa interior en la cama junto a Dolores, la mujer se levantó de la cama y abrió la puerta. Eran las dos de la mañana. Allí aparecieron su hermana Pilar y su cuñado Isaac. El hombre irrumpió en el apartamento y golpeó a Pedro con una palanca, una herramienta puntiaguda. “Lo golpeó en la cabeza al menos doce veces”, afirma el escrito de acusación del fiscal.
Foto de archivo de los gemelos Vázquez
El plan que habían trazado los gemelos e Isaac consistía en matar a Pedro en la habitación, envolverlo en una manta y transportarlo a un bosque. Sin embargo, Pedro no murió instantáneamente, sino que logró escapar al rellano del cuarto piso e incluso bajar al piso de abajo. Allí Isaac continuó golpeándolo hasta que finalmente se desplomó. ¿Por qué querían matarlo? Dolores, que tuvo problemas con el alcohol los días previos al crimen, paseaba por Sabadell mostrando una fotografía suya con heridas y hematomas en la cara que, según ella, eran de una paliza propinada por Pedro. En realidad, esas lesiones fueron provocadas por la mujer al caer en estado de ebriedad. Ahora, los dos gemelos alegan que Dolores sufrió abusos sin que haya trascendido ninguna prueba.
Los imputados fueron sorprendidos por vecinos que los grabaron por la mirilla golpeando el cadáver y limpiando la sangre de la escena del crimen.
Los golpes, gritos y ruidos despertaron a algunos vecinos que sorprendieron al perpetrador con el cuerpo en el rellano. Dos residentes también acercaron sus teléfonos móviles a la mirilla y grabaron la escena. Allí captaron a Isaac pateando el cadáver de Pedro y pisándole el pecho para comprobar que estaba muerto. Posteriormente, los vecinos también grabaron a los dos gemelos limpiando el rastro de sangre que había dejado Pedro al intentar escapar. “Los tres imputados intentaron limpiar las manchas de sangre y restos orgánicos resultantes de la agresión con el fin de eliminar todo vestigio de la misma, luego de haber envuelto el cuerpo inerte de Pedro en una manta y trasladarlo al interior de su apartamento, momento en el que fueron sorprendidos por la agentes de policía”, subraya el fiscal en su escrito de acusación.
La aparición de aquellos testigos inesperados trastocó los planes. Los vecinos avisaron a los Mossos que en cuestión de pocos minutos se presentaron en el edificio y sorprendieron a Isaac manchado de sangre y a los gemelos limpiando la sangre mientras el cuerpo de Pedro estaba envuelto en una manta. En ese primer momento, Isaac confesó el crimen sin involucrar a los gemelos.
El acusado, Isaac Gil, fue sorprendido cubierto de sangre por los Mossos la noche del crimen.
Sin embargo, seis meses después, al analizar el contenido de los móviles de las hermanas, los Mossos las detienen. En los teléfonos encontraron multitud de mensajes de WhatsApp entre los tres implicados en los que planeaban abiertamente y con extrema frialdad el crimen de Pedro. Pilar envía un mensaje a su novio Isaac en el que le comentan los pasos a seguir para cometer el crimen. “Hola ‘cariño’, estuve hablando con mi hermana por teléfono y está mala, mala. Hemos estado hablando… porque ella ya no puede más, y está normal… de cómo conseguir cloroformo, cariño, para ponerlo a dormir y luego… eso. ¿Saber? Porque ella no quiere que este viernes suceda ahora. Y estoy de acuerdo con eso. Entonces, si podemos conseguirlo para que ella pueda dormir sobre él y podamos terminarlo, entonces estará listo el viernes por la noche. Pido mi día personal. Ningún problema. Seguimos hablando más tarde, voy a salir de compras. Hasta luego.” En un vídeo interceptado por los Mossos, Isaac aparece anunciando a su novia que se había comprado un dispositivo electrónico con el que pretendían atacar a la víctima.