A las terribles imágenes se suma el siguiente mensaje: “Estas son algunas de las fotografías que el Primer Ministro Benjamín Netanyahu mostró al Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken. Advertencia: son fotografías horripilantes de bebés asesinados y quemado por los monstruos de Hamás. Hamás es inhumano. Hamás es ISIS.”
En este sentido, un alto responsable del Ejército ha asegurado que él mismo encontró un bebé decapitado en una de las comunidades israelíes cercanas a Gaza, y que otros compañeros suyos vieron más, aunque no ha dado una cifra concreta.
Israel ha aprovechado las imágenes de los menores y el testimonio del citado alto cargo para denunciar oficialmente este jueves la decapitación de algunos bebés, además de la quema y asesinato de niños en el ataque”horrible y monstruoso” del grupo islamista Hamás el sábado pasado.
Hamás lo niega
El miércoles pasado, el grupo islamista Hamás negó haber “matado a niños, decapitado y atacado a civiles” públicamente durante su ataque a Israel el sábado. La declaración fue hecha en respuesta a la “acusaciones fabricadas” de los soldados israelíes sobre las masacres perpetradas en los kibutzs por estos milicianos.
“Afirmamos firmemente la falsedad de las acusaciones inventado y propagado por algunos medios de comunicación occidentales que adoptan la narrativa sionista, incluidas afirmaciones de matar niños, decapitar y atacar a civiles”, dijo Hamás en el comunicado.
El Movimiento de Resistencia Islámica defendió que sus militantes sólo “atacaron al aparato militar y de seguridad israelí, que es un objetivo legítimo“.
Biden afirmó haber visto las fotos.
“Es importante que los estadounidenses vean lo que está sucediendo. He estado haciendo esto durante mucho tiempo y nunca pensé que Lo vería y lo habría confirmado. Imágenes de terroristas decapitando a niños”. Estas fueron las palabras que el presidente estadounidense, Joe Biden, pronunció este miércoles ante líderes de la comunidad judía del país.
Pero, poco después de esta declaración, la propia Casa Blanca ha rectificó las declaraciones de Biden. La institución ha asegurado que ni el presidente ni los funcionarios estadounidenses han visto estas imágenes.