María -nombre ficticio-, una adolescente de 16 años se encontraba en un centro de acogida de Alcalá de Guadaira (Sevilla). Vivió allí después de denunciar a su madre por Violencia domésticasegún confirman fuentes policiales a ‘Europa Press’.
La joven pasó horas hablando con su celular cuando se encontraba en el centro. A través de la red social Instagram conoció a otro chico de 17 años que residía en Madrid. Y decidió escaparse del centro de Sevilla para estar con él. Cuando llegó a la capital, los dos adolescentes -y menores de edad- estaban casados en el rito gitano, según informó la citada agencia de noticias.
María comenzó a vivir en la casa del joven, quien también vivía con sus padres. Eso se volvió un infierno Comenzó el maltrato y control eterno. hasta que logró escapar de allí también.
La niña dice que el control fue total por parte de la familia del joven y también de su esposo, al punto que No podía salir a comprar pastillas anticonceptivas. en la farmacia. Pudo escapar de allí y fue entonces cuando la mujer la encontró llorando desconsoladamente en una de las estaciones del Metro de Madrid.
La mujer quiso ofrecer su ayuda. La Fundación Secretariado Gitano se puso en contacto con la Comisaría de Apoyo y Protección a Mujeres, Menores y Mayores de la Policía Municipal y los agentes se dirigieron hasta donde se encontraba la menor en compañía de la mujer que la había ayudado.
Denunció violencia de género y La trasladaron al Hospital Gregorio Marañón para examinarlo. Una vez salió del centro hospitalario se dirigió al Primer Centro de Acogida de Hortaleza.
Él El joven con el que se había casado fue arrestado. por el Grupo de Menores de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Policía Nacional en Madrid.
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