A estación de bombeo en Castrelo, proyectado por el grupo andaluz Cuerva, tiene como objetivo almacenar agua en un estanque situado a una altura sobre el nivel actual. Este estanque ocuparía una superficie de 22 hectáreas. Cuando fuera necesario generar electricidad, el agua se liberaría a través de un conducto subterráneo para producir energía en una estación central en la caverna. El coste del proyecto supera los 235 millones de euros.
Varela cargó contra el carácter “especulativo” de un proyecto cuyos beneficios, dijo, se quedarán fuera del territorio. Por ello, abogó por apostar por un nuevo modelo energético gallego, aclarando que no están en contra de las renovables “per se”.
El portavoz estuvo apoyado por representantes del BNG, dos ayuntamientos de Castrelo de Miño -Francisco Alonso- y Cartelle -Concha Alonso-.