Se trata de un hombre de 49 años de la vecina localidad de Narn que fue detenido en Ferrol.
Diez años después, las investigaciones han dado sus frutos y la Guardia Civil acaba de detener a un hombre como sospechoso del asesinato de Elisa Abruedoquien el 1 de septiembre de 2013 fue encontrada asesinada y violada en una zona boscosa de Cabañasen la comarca de Coruesa de Ferrolterra. Su cuerpo se encontraba apenas a medio kilómetro de su casa y, aunque tenía restos biológicos de su asesino, hasta el momento no ha sido encontrado.
La Guardia Civil confirmó la detención este martes 17 de octubre, diez años, un mes y 17 días después del inicio de la investigación. Se trata de un hombre de 49 años de la vecina localidad de Narn que fue detenido en Ferrol.
La investigación, llevada a cabo por agentes de la Comandancia de A Corúa y de la Unidad Central Operativa, está dirigida por el Juzgado de Instrucción número 2 de Ferrol y se mantiene en secreto de sumario, pero la Guardia Civil ha confirmado la detención, que supone un giro a un caso que había causado gran conmoción en esta zona de Ferrolterra.
Adrián y Álvaro Fernández Abruedo, hijos de Elisa, mantuvieron abierta la lucha para localizar al asesino de su madre después de que su padre y marido de la víctima Manuel Fernández Martínez, muriera un año y medio después de que su madre, en 2015, en un accidente laboral en la A. Muelle de Graa, en el Arsenal Militar de Ferrol, cuando le cayó encima parte de la carga de un camión.
En una entrevista con este diario en 2022, Adrin insistió en que mantenía intactas sus “esperanzas” de que algún día su asesino fuera a prisión porque así se asegurarían “no volvería a repetirlo”.
Confiaron en las últimas gestiones realizadas por la UCO de la Guardia Civil, que realizó diversos exámenes de ADN por toda la comarca para intentar localizar al sospechoso del crimen. En el cuerpo de Elisa había restos biológicos que no coincidían con el perfil genético de ninguna persona registrada y esto fue un intento de identificar al responsable.
Adrián está convencido de que su madre fue víctima “por casualidad”. Ha confiado en que la Guardia Civil, algún día, podrá resolver el crimen. Finalmente lo ha hecho.