El hallazgo del cuerpo del joven deja dudas sobre la eficacia de la investigación
No es fácil explicar cómo es posible que el cuerpo de Álvaro Prieto estuviera visible, encajado entre dos vagones de tren en los talleres de la Estación de Santa Justa de Sevillay que su presencia pasaría desapercibida para los investigadores y el personal de Renfe y Adif durante los cuatro días, poco más de 99 horaslo que ha durado la búsqueda del joven cordobés.
Lo que una cámara de televisión capturó por casualidad -y lo que decenas de viajeros del AVE de Madrid que llegó a las 13:00 horas a Sevilla También pudieron observar a través de la ventanilla la entrada de su tren en la capital andaluza, aunque permaneció oculto a los ojos de los rastreadores que, según la Policía Nacional, habían peinado la zona en los días anteriores.
Renfe ha informado este lunes de que el tren de Media Distancia, un tren regional que presta servicio entre Córdoba, Sevilla y Cádiz, había sido retirado de la circulación desde el 24 de agosto, luego de verse involucrado en otro accidente. Ese día el convoy había chocado contra un vehículo con dos ocupantes que resultaron gravemente heridos. La colisión se produjo en un paso a nivel situado en Alcolea (Córdoba), cerca del barrio Los Ángeles. Posteriormente el tren fue trasladado a los talleres de Sevilla para repararlo y también con la intención de tenerlo a disposición del juez que investigaba el accidente.
Ayer los técnicos lo trasladaron por algún motivo relacionado con labores de mantenimiento. De hecho, cuando la cámara de TVE tomó la sorprendente imagen, el vehículo se movía, aunque sin pasajeros y lentamente. Es posible, por tanto, que el convoy no permaneciera en el mismo lugar durante estos cuatro días y, por tanto, que el cuerpo de Álvaro Prieto no fuera tan visible hasta este lunes.
El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernándezconfirmó que el allanamiento que realizaron efectivos de la Policía Nacional y el Unidad Militar de Emergencia (UME) realizada la noche del domingo con perros adiestrados habían dejado la zona del taller al aire libre. El plan era repetir el operativo en esa zona el mismo lunes, aunque ya no fue necesario, porque un equipo de televisión encontró el cuerpo completamente por casualidad.
Déjalo en manos de los profesionales.
En las primeras horas tras la desaparición, tanto la familia como algunos amigos de Álvaro se desplazaron a Sevilla para participar en la búsqueda, pero la Policía les pidió que evitaran actuar por su cuenta y dejaran trabajar a los investigadores. Un portavoz de la familia así lo informó a EL MUNDO y confirmó que se habían respetado las recomendaciones de los expertos.
Pero pasaron las horas y no había noticias de Álvaro. La Policía siempre ha mantenido absoluto secreto sobre el avance de las investigaciones. El sábado, la madre del niño dio unas declaraciones a Onda Cero Radio, en las que apostaba a que el joven había intentado regresar a Córdoba parando un coche y que alguien le había herido o atropellado.
Según ha podido saber EL MUNDO, en el momento del hallazgo la búsqueda se centró en los alrededores del Aeropuerto de Sevilla, concretamente en las cunetas y márgenes de la N-4, bajo la hipótesis de que, efectivamente, el niño hubiera sido ejecutado. terminado y abandonado sin ayuda.
Pero, en realidad, Álvaro Prieto nunca abandonó las instalaciones de la estación de Santa Justa. De hecho, falleció el jueves, según las primeras conclusiones de los peritos forenses, dado el estado en el que se encontró el cuerpo.
Los testimonios de vecinos que aseguraron haberle visto intentando acceder de nuevo a las vías desde el exterior de la estación resultaron ser reales. El joven buscó un lugar fuera de la vista del personal de seguridad, probablemente con la intención de abordar otro tren que lo regresaría a Córdoba más tarde en la mañana. Y subió a un convoy que se encontraba aislado en apartaderos, donde se encontró con una descarga eléctrica de más de 3.000 voltios que lo mató instantáneamente.
Una de las preguntas que probablemente no encontrará respuesta en el sumario elaborado por el titular del juzgado número 11 de Sevilla es por qué Álvaro actuó de una forma tan aparentemente desesperada. ¿Por qué no pidió ayuda para contactar con sus familiares o amigos, quienes sin duda le habrían proporcionado los medios para regresar por una vía alternativa?
Álvaro Prieto Era un buen estudiante, asistió Ingeniero Mecánico de la Universidad de Córdoba. Era deportista, jugaba en el equipo juvenil A del Córdoba CF y estaba bien integrado en su entorno familiar y familiar. No tenía ningún motivo aparente para querer huir de nada. ni de nadie y dio señales de que su intención era volver a casa después de una noche de fiesta con sus amigos en Sevilla. Por ello, desde el primer momento quedó prácticamente descartada una ausencia voluntaria y su desaparición fue calificada de “inquietante” por la Policía.