El portavoz de Vox será segundo teniente de alcalde con Catal y los cuatro concejales gestionarán “áreas de contacto con la ciudadanía”, en las que también se incluyen los Partidos (sin Fallas)
A diferencia del pacto exprés que inició voz hacia PÁGINAS para hacer presidente de la generalitat valenciana Para Carlos Mazón, el acuerdo para un gobierno conjunto en el Ayuntamiento de Valencia Han sido necesarios cuatro meses para montarlo. Los cuatro meses exactos que el alcalde de la tercera ciudad de España, el popular María José Catal ha sabido resistir las presiones del partido de Santiago Abascal. Fuentes de Vox, sin embargo, han confirmado a este periódico que este jueves se alcanzó un “principio de acuerdo” con el PP.
Las fuentes de Vox consultadas avanzan que el portavoz de la formación, Juanma BadenasSerá el segundo teniente de alcalde, además de que tendrán competencias los cuatro concejales. A falta de cerrar los últimos flecos, Vox gestionará “áreas de contacto con la ciudadanía”, entre las que se encuentran Familia e Infancia, Empleo y Emprendimiento, Fiestas (pero sin Fallas), Mayores, Juventud y Salud, según fuentes conocedoras. las negociaciones.
En cualquier caso, la propia Catal, que ha reconocido el acuerdo a última hora de esta tarde, ha afirmado que “las resoluciones de la delegación no están firmadas”.
El pacto, que se firmará en las próximas horas y se formalizará este viernes, llega después del acuerdo previo entre ambas partes para llevar a cabo las ordenanzas fiscales que permitirán una rebaja de impuestos en Valencia y, sobre todo, el desbloqueo de los que serán los primeros presupuestos del Catal. Vox había amenazado con derrocarles si Catal no se abría a integrar a sus cuatro concejales en el equipo municipal, ya que el PP sólo cuenta con 13 y hasta ahora no contaba con mayoría absoluta.
Esto ha provocado en las últimas semanas una situación insólita en el Ayuntamiento de Valencia, donde Vox prácticamente había capitalizado el papel de líder de la oposición a Catal. Si bien la relación entre ambos partidos está plenamente engrasada a nivel regional, a nivel municipal el choque ha sido constante.
Hasta el punto de que Vox ha puesto en más apuros a Catal, al negarse a apoyar nombramientos en empresas municipales, por ejemplo. La última amenaza para tensar la cuerda fue la advertencia a Catal de que podría verse obligada a prorrogar los últimos presupuestos del anterior gobierno de izquierdas de Joan Rib. En esta línea, Badenas llegó incluso a acusar a Catal de “mantener la era Rib” y de no tener un proyecto alternativo para Valencia.
Con el pacto, Catal busca en consecuencia garantizar la gobernabilidad de la ciudad, tras dar por hecho que Vox no estaba dispuesto a dar un cheque en blanco al PP ni siquiera llegar a acuerdos concretos. Tanto Compromiso como PSOE habían denunciado el “pacto oculto” entre ambos partidos.