Evergrande ya había anunciado meses atrás una reestructuración de parte de su deuda costa afuera. Los problemas económicos venían de atrás. En el ejercicio 2021 sufrió unas pérdidas de 476.095 millones de yuanes (60.161 millones de euros), aunque un año después logró reducir esas cifras a más de la mitad (13.283 millones de euros).
Las pérdidas económicas de este gigante inmobiliario chino ascienden a 581.211 millones de yuanes (73.369 millones de euros) entre 2021 y 2022, según cuentas publicadas en julio.
La publicación de las cuentas de la compañía para los años anteriores de 2021 y 2022 fue parte de los esfuerzos del desarrollador inmobiliario para volver a cotizar.
Por ello, ha solicitado la protección concursal contenida en el Capítulo 15 de la ley de quiebras de estados unidos, que protege los activos de la compañía en Estados Unidos, mientras se gestionan acuerdos de reestructuración en otras jurisdicciones.
En última instancia, esta sección legal de las reglas de quiebra permite que los Estados Unidos reconozca los procedimientos de quiebra en el extranjero y permite que los representantes extranjeros accedan a los procedimientos legales.
Más de 37.000 millones de euros para entregar inmuebles
La petición de Evergrande se refiere a la procedimientos de reestructuración que se están llevando a cabo en Hong Kong y las Islas Caimán. Se reunirá con sus deudores los días 23 y 24 de agosto, reunión en la que votarán la propuesta de plan de reestructuración de sus casi 20.000 millones de dólares (unos 18.000 millones de euros) de deuda ‘offshore’.
Además, la compañía reconoce que necesitará una financiación adicional de hasta 300.000 millones de yuanes (37.208 millones de euros) para poder entregar las propiedades ya vendidas -en plan-.
El sector inmobiliario de China sufre dificultades económicas
Otro desarrollador inmobiliario del país asiático, Jardín campestreadvirtió que espera registrarse pérdidas económicas en los primeros seis meses de 2023 y puso en un aprieto a la Bolsa de Hong Kong provocando su desplome, informa ‘Europa Press’.
La posición financiera de varias empresas inmobiliarias chinas empeoró después de que, en agosto de 2020, Beijing anunciara Restricciones al acceso a la financiación bancaria para promotores Habían acumulado un alto nivel de deuda.